Un hombre francés con una enfermedad terminal, quien intentó convencer sin éxito al presidente Emmanuel Macron de que le permitiera morir mediante «asistencia médica activa», dice que planea transmitir su propia muerte en vivo a través de Facebook.
El hombre de origen francés, Alain Cocq, de 57 años y originario de Dijon, tiene una extraña enfermedad terminal que hace que sus arterias se peguen entre sí.
Él calcula que solo le quedan algunos días de vida después de suspender todos los medicamentos, alimentos y bebidas, lo que planea hacer este viernes a las 11 pm (6 pm ET).
La eutanasia es ilegal en Francia. La ley en este país también dicta que la sedación profunda y continua, que puede acelerar la muerte de una persona y dejarla inconsciente hasta que fallezca, no es legal a menos de que se den circunstancias específicas establecidas por la Ley Claeys-Leonetti de 2016, la cual exige además que la muerte de una persona sea inminente. Pero los ciudadanos franceses sí tienen derecho a suspender la atención médica y, según las normas, no hay enjuiciamiento por suicidio.
Cocq, quien está confinado a una silla de ruedas y fundó una organización para mejorar la vida de las personas en condición de discapacidad, escribió una carta a Macron con fecha del 20 de julio en la que le pidió que le permitiera morir «con dignidad» y allí describió su «sufrimiento extremadamente violento».
«Me gustaría aclararle que, actualmente, me encuentro en una situación de estar sano mentalmente, confinado en un cuerpo disfuncional, lisiado por el sufrimiento», escribió en la carta que fue vista por CNN.
«¿Soportaría, señor presidente, que le vaciaran los intestinos en una bolsa, que le vaciaran la vejiga en una bolsa y que lo alimentaran con una bolsa, que un tercero tuviera que bañarlo, por estar paralizado debido a un dolor insoportable?», continuó Cocq en la misiva.
Cocq instó a Macron a revisar las leyes francesas que impiden que los profesionales de la salud aceleren con medicamentos la muerte de sus pacientes moribundos.
«Simplemente pido irme con dignidad, con asistencia médica activa, porque mi cuerpo disfuncional me impide hacerlo rodeado de mi familia y mis amigos», escribió el hombre francés.
«Algunos usan el término ‘eutanasia activa’ o ‘suicidio asistido’, pero para mí el término más adecuado es ‘fin de la vida con dignidad con asistencia médica activa’», escribió.
En respuesta, el presidente Macron escribió que estaba «conmovido» por la carta de Cocq y admiraba la «notable fuerza de voluntad» que había demostrado al librar «batallas incesantes» con la enfermedad.
Sin embargo, dijo que no podía cumplir con la solicitud porque no está «situado por encima de la ley» y no podía pedirle a nadie que «traspase nuestro marco legal actual».
Fuente: CNN