Víctor Mondino, ingeniero forestal de INTA Esquel, habló sobre la recolección y cultivo de semillas de árboles nativos del bosque nativo patagónico, pensando en una posible reforestación que llevará años, ya que los bosques incendiados son «centenarios».
En ese sentido explicó que en las experiencias realizadas en los últimos años se prioriza la cosecha del «Ciprés de la cordillera, Coihue y Lenga, que son las que no rebrotan luego de un incendio forestal», y que deben ser «cercanas a las áreas incendiadas» ya que estén adaptadas a la zona que se intentará restaurar.