“Acuérdese de su pasado, porque usted sí que cometió unos delitos”, dijo enfurecido este lunes pasado a través de un megáfono, el ex – combatiente de Malvinas y ex – suboficial mayor retirado de la Policía, en las afueras de la Jefatura después de una reunión muy tensa entre los delegados de bienestar Policial con la plana mayor por los salarios.
La razón del enojo de Rocha fue porque en momentos de la reunión Néstor “el tero” Gómez Ocampo se le acercó y le dijo “usted no puede entrar, no es policía”, por ende el ex combatiente no pudo ingresar a la reunión.
“Me lo dijo un compañero con el que caminé las calles en Comodoro Rivadavia y que una vez hasta lo salvé, y que es un delincuente, porque ES un delincuente… me refiero puntualmente al subjefe de Policía, el conocido “tero” Gómez Ocampo, que me dijo -vos no entrás porque no sos más policía-”, contó.
Así fue como el subjefe policial, cual patovica de un boliche le impidió el paso a un hombre que tiene más mérito que él vistiendo el uniforme.
Estamos viviendo circunstancias realmente surrealistas al nivel institucional en nuestra provincia, puesto a que ya es un hecho que la comunidad policial identifica nada menos que al subjefe de la Policía como un delincuente, falta nomás que ingresen los efectivos a su despacho en Jefatura para ponerle las esposas y llevárselo detenido, sería un espectáculo digno de pochoclos.
A Massoni por su parte ya se le estaría viniendo la noche, uno de los representantes de Bienestar Policial Julio Moreira, dio a entender que al parecer el jefe de Policía Miguel Gómez y su hermano Paulino ya estarían entregando atado como matambre a los leones al ministro de Seguridad.
Los hermanos Gómez durante la reunión, habrían dicho que el responsable de todo este escándalo sería Massoni. “Todo lo maneja Massoni”, habría sido la respuesta de Gómez hacia los delegados, lavándose olímpicamente las manos.
Pero no se deje engañar, siga leyendo la nota.
Cabe destacar que Massoni no pudo estar en la reunión porque estaba ocupado en cosas más importantes: su campaña política.
Mientras tanto, el clima se enardece por minuto, los delegados siguen perdiendo su tiempo en Fontana 50 y en Jefatura, la cúpula policial sigue haciéndole la bicicleta a la comunidad de la fuerza y los efectivos están viviendo de bolsones de alimentos provisionados por los municipios.
Los delegados de Bienestar Policial dieron este lunes pasado, un ultimátum de 48 horas para resolver la cuestión, si no sucede nada para el miércoles, empezarán a tomar medidas drásticas.
Héctor Dante Rocha dio a entender que desde las altas esferas de la Policía estarían realizando una campaña de difamación con su nombre, como represalia por su activismo en favor de los derechos de los policías.
Andan diciendo que fue “exonerado de la Policía” pero él lo niega: “Yo nunca fui exonerado, porque para serlo es necesario cometer delitos en la fuerza, y yo no cometí ningún delito, usted si cometió delitos (por Gómez Ocampo), acuérdese de su pasado… a mí me cesantearon que es distinto, y lo hicieron porque defendí los derechos de mis compañeros en la calle”.
Héctor Dante Rocha fue designado en el pasado vocero del Sindicato de Policías de Chubut, un cargo que todo el mundo le escapa a sabiendas de las consecuencias políticas y todas las rispideces que tiene que superar quién detenta esa responsabilidad; puesto a que implica muchas veces enfrentarse a las altas esferas policiales.
Solo pasó aproximadamente un día de esta manifestación de Rocha en las puertas de Jefatura con sus compañeros, que este martes en una entrevista telefónica con Jornada, el jefe Miguel Gómez salió a atacar a Rocha diciendo que “un policía cesanteado quiso tomar la Jefatura de Policía”.
Al parecer, Miguel Gómez cuando se encuentra cara a cara con los delegados de Bienestar actuaría como un caniche mojado, pero cuando tiene que ser entrevistado por los medios de comunicación afines al gobierno, se envalentona y comienza a defenestrar a todos aquellos que están en contra de su “amo”, Federico Massoni.
La campaña anti-Rocha sería tan obvia, faltaría nomás que el ministro de Seguridad le dedique un discurso entero al ex – policía.
Vaya que sí es notorio cuando una persona es considerada una “amenaza” para el gobierno.