La Fiesta Nacional del Tren a Vapor será en El Maitén los días 11, 12 y 13 de febrero. Arranca el viernes con la presentación del consagrado grupo de música andina Los Tekis; mientras que para el sábado están confirmados Francisco Benítez, el joven que padece tartamudez y ganó La Voz Argentina, y la banda cuartetera 2001. Para el cierre, el domingo estará La Beriso, el grupo de rock de mayor trascendencia en el país durante las últimas décadas.
A estos espectáculos “se suman varios grupos artísticos de la región patagónica, cuya grilla está en etapa de definición esta semana”, adelantaron desde la organización, a cargo del municipio local.
De igual modo, se adelantó que “el sábado habrá jineteada en el campo El Bagual; y el domingo las tradicionales carreras cuadreras, con una programación que incluye a los mejores caballos de la zona”.
Por otra parte, el próximo domingo 23 de enero, se realizará la venta de los stands dedicados a la gastronomía, tienda y parque de juegos.
Asimismo, para celebrar a La Trochita que “da razón de vivir al pueblo ferroviario”, se harán excursiones diurnas y nocturnas hasta las estaciones Bruno Thomae y Ñorquinco (cruzando el río Chubut), con la premisa de que “los turistas puedan tener una experiencia de este auténtico viaje por el tiempo”. Cabe recordar que este año, tanto las locomotoras Baldwin (americanas) y Henschel (alemanas), como los vagones de origen belga, cumplirán un siglo de vida en el ramal que une los pueblos de la meseta.
Desde 1984, con la vuelta de la democracia, la comunidad de El Maitén rinde homenaje al Viejo Expreso Patagónico y a sus pioneros. Durante décadas, fue la principal fuente de empleo y llegó a tener 300 operarios en diferentes funciones.
En la actualidad, está enfocado como un producto turístico reconocido a nivel internacional y el objetivo de lugareños y autoridades apunta “a sostener políticas de Estado que nos permitan consolidar su vigencia y seguir atrayendo amantes de los rieles del mundo entero a conocer esta maravilla que nos pertenece”.
El histórico trencito patagónico, con su trocha “económica” de sólo 75 centímetros, recorría 402 kilómetros y doblaba en más de 600 curvas entre Jacobacci y Esquel. El Maitén siempre fue importante por su ubicación estratégica, donde se montaron los talleres de mantenimiento del ramal.
Se gestó desde 1909 (bajo el impulso de Ezequiel Ramos Mejía), con la premisa de consolidar poblaciones y transportar productos agropecuarios (atraviesa íntegramente las estancias inglesas -hoy Benetton- de norte a sur), además de las cargas comerciales de una franja cordillerana que se extendía por las provincias de Río Negro y Chubut, vinculando parajes tan remotos como Leleque, Mayoco, Fitalancao o Cerro Mesa. A El Maitén llegó en 1942 y a Esquel en 1945.
“En El Maitén podés hablar mal de algún pariente, pero no se te ocurra criticar a La Trochita porque te van a saltar a la yugular. Este pueblo sigue teniendo mucha pertenencia con su trencito y prácticamente en todas las casas hay alguien que está ligado al ferrocarril”, sostiene Carlos Kmet, el jefe de los talleres, ya jubilado. Nieto e hijo de aquellos que construyeron el ramal, su pasión por La Trochita lo lleva todos los días hasta los galpones “para ver cómo andan las cosas”.