La Ley de Emergencia Hídrica venció esta semana y no fue prorrogada por el Gobierno provincial. En la normativa se establecía un fondo de $ 500 millones para obras y acciones tendientes a mitigar la crisis. Desde el IPA se aseguró que muchas de ellas estaban en licitación. El invierno con abundantes precipitaciones mejoró el panorama, aunque solo para el próximo verano.
El pasado 6 de septiembre finalizó el plazo de 1 año establecido por la Ley de Emergencia Hídrica sancionada por la Legislatura el año pasado, ante los alarmantes niveles que presentaban las principales cuencas de la Provincia, las del Río Chubut y el Río Senguer.
Si bien el invierno presentó abundantes nevadas y lluvias en las nacientes de los cursos de agua y ocasionaron un ligero aumento de caudal en el Dique Florentino Ameghino y en el Lago Musters, lo cierto es que el panorama para los próximos años no es alentador.
Sin embargo, esta leve mejora en el escenario actual quitó algo de atención al tema, que pasó desapercibido durante los últimos meses luego de la crítica situación vivida en el verano anterior.
En cuanto a la Ley de Emergencia, la misma establecía un fondo de 500 millones de pesos para obras y acciones tendientes a mitigar la escases de agua dulce, muchas de la cuales el titular del IPA, Nicolás Cittadini, aseguró que “están en proceso de licitación”, con lo cual no se vio la necesidad de prorrogar la Emergencia.
También es importante señalar que en reiteradas ocasiones en la Legislatura del Chubut se efectuaron pedidos de informes detallados de las acciones realizadas y los fondos ejecutados a partir de la Ley, ya que desde las comunidades se advertía la falta de ejecución de obras.
Lo cierto es que ha pasado un año ya desde la promulgación en el Boletín Oficial y son pocos los anuncios oficiales respecto a las obras y acciones que se preveían en la Ley, sumado al vencimiento de la misma.