Un reciente estudio global reveló que la soledad puede incrementar el riesgo de desarrollar demencia en un 31%. El análisis, considerado el más grande hasta la fecha, abarcó a casi 609.000 personas en todo el mundo y fue publicado en la revista Nature Mental Health.
La investigación encontró que la soledad no solo aumenta la posibilidad de padecer demencia, sino también el riesgo de deterioro cognitivo general en un 15%. Este deterioro incluye problemas como la pérdida de memoria, dificultades para tomar decisiones y falta de concentración. Los resultados del estudio se mantuvieron incluso al considerar factores como la depresión o el aislamiento social.
Según el profesor de psicología Páraic Ó Súilleabháin, uno de los autores del estudio, la soledad es un factor de riesgo clave para el desarrollo de demencia en el futuro.
Los autores sugieren que abordar la soledad promoviendo la conexión social podría ser una vía importante para proteger la salud cognitiva en la vejez.
Fuente: Euronews.