Papa Francisco delegar lectura bronquitis. El papa Francisco, de 88 años, interrumpió este miércoles la lectura de su catequesis durante la audiencia general en el Vaticano debido a los efectos de una bronquitis. Tras leer unas líneas, el pontífice cedió la lectura a un colaborador al sentirse afectado por la enfermedad.
“Y ahora pido al sacerdote que continúe leyendo. Yo con mi bronquitis no puedo ahora. Espero poder la próxima vez,” expresó Francisco, antes de entregar el texto a don Pierluigi Giroli, miembro de la Secretaría de Estado.
El domingo pasado, Francisco ya había tenido que detener su homilía durante la misa del Jubileo de las Fuerzas Armadas en la Plaza de San Pedro por dificultades respiratorias. En aquella ocasión, también delegó la lectura y se dirigió brevemente a los asistentes: “Ahora me disculpo y pido al maestro que continúe la lectura por dificultad en la respiración.”
Las imágenes de la audiencia muestran a Francisco visiblemente afectado mientras tose y se lleva su mano a la cabeza, aquejado por el malestar.
El miércoles de la semana pasada, Francisco tampoco leyó su catequesis durante la audiencia general en el aula Pablo VI del Vaticano debido a un “fuerte resfriado”, según informó la Santa Sede. “Pido perdón, pero con este fuerte resfriado me es difícil hablar,” expresó el pontífice antes de ceder la lectura al sacerdote Pierluigi Giroli, funcionario de la Secretaría de Estado.
A pesar de su malestar, Francisco, de 88 años, sí pronunció los saludos a los fieles en varios idiomas. Durante su mensaje a los peregrinos polacos, el papa animó a rezar por los sacerdotes y religiosos que trabajan en países afectados por conflictos, como Ucrania, Oriente Medio y la República Democrática del Congo. “Para muchos, esta presencia es la prueba de que Dios siempre se acuerda de ellos,” expresó.
El Vaticano ha informado que el papa padece problemas respiratorios recurrentes, como episodios prolongados de bronquitis, y utiliza silla de ruedas debido a afecciones en las rodillas. En marzo de 2023, estuvo hospitalizado tres días en el Policlínico Gemelli de Roma por una infección respiratoria, lo que generó preocupación sobre su estado de salud.
La condición física del pontífice es un tema de constante especulación en los círculos vaticanos, especialmente desde que el papa Benedicto XVI renunció en 2013, en parte por complicaciones físicas tras una caída en 2012. Aunque Francisco ha descartado en varias ocasiones la posibilidad de abdicar, ha reconocido que su movilidad reducida le ha llevado a adaptar su agenda y limitar algunos de sus desplazamientos.