Chats y documentos revelan que los directivos de HLB Pharma y Ramallo sugirieron borrar pruebas en la causa por fentanilo contaminado.
El juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, dictó el procesamiento y prisión preventiva de Ariel Fernando García, titular de HLB Pharma, su hermano Diego Hernán García, su madre Nilda Furfaro, y otros directivos, en la causa por muertes relacionadas con fentanilo contaminado. Otros imputados, como María Victoria García y Wilson Daniel Pons, fueron procesados sin prisión preventiva, aunque con prohibición de salida del país y comparecencia mensual.
Kreplak consideró a todos los imputados “prima facie coautores penalmente responsables del delito de adulteración de sustancias medicinales que resultó en la muerte de al menos 20 personas”. Además, indicó que “la línea investigativa adoptada y la intensa actividad probatoria desarrollada al respecto permitió, a la fecha, incorporar progresivamente 124 pacientes fallecidos con posible asociación al brote por administración de fentanilo contaminado”.
Ariel García Furfaro y directivos de HLB Pharma y Ramallo procesados por fentanilo contaminado
En su resolución, el juez destacó las “pésimas condiciones en que se producían los medicamentos, ya sea en cuestiones de mantenimiento, insumos, agua, controles, registros documentales, entre otras tantas”. Además, se detectó en “muestras analizadas una presencia significativa de arsénico” muy por encima del límite permitido, “bajo total inobservancia de los estándares mínimos establecidos por las Buenas Prácticas de Fabricación (BPF)”.
Sobre Ariel García, Kreplak afirmó que “la instrucción ha logrado demostrar que Ariel García es la figura principal de esta tragedia sanitaria” y advirtió que “no era confiable la documentación que registró la producción y control de calidad de los lotes adulterados de fentanilo”. Señaló que “la prueba obtenida indica que los batch record y su documental anexa no reflejaban la realidad de lo que a ciencia cierta pasaba dentro de la planta” y que “los registros documentales de los productos elaborados en Laboratorios Ramallo se realizaban ex post facto respecto de su fabricación, antedatándolos, para lo cual se utilizaban datos inexistentes, inventados y/o fórmulas preexistentes de otros medicamentos”.
Chats y evidencias
El juez explicó que Laboratorios Ramallo SA elaboraba su producción “sin cubrir los puestos clave en la totalidad de los turnos”, por lo que “los operarios trabajaban sin la dirección de personal calificado que debía supervisar el proceso”. Además, se reconstruyó que la actitud de los responsables, lejos de corregir las deficiencias, se desentendieron de ellas, llegando a sugerir “borrar o modificar documentación para aparentar cumplimiento”.
Los mensajes y chats entre los trabajadores evidenciaron el “descontrol” con el que se trabajaba y cómo se manipulaban registros críticos para ocultar irregularidades en la producción del fentanilo contaminado.
La causa por fentanilo contaminado revela graves negligencias y posibles manipulaciones de pruebas en HLB Pharma y Ramallo. Los chats y registros comprometen a los directivos y subrayan la necesidad de reforzar los controles en la industria farmacéutica para evitar nuevas tragedias, consolidando la relevancia de la causa fentanilo en la agenda judicial argentina.