El sistema vial de cruces de ruta podría reemplazar a las rotondas en Argentina para mejorar la seguridad y agilizar el tránsito.
Un cambio profundo en la infraestructura vial podría llegar a la Argentina: la implementación de cruces de ruta con intersecciones alternativas en lugar de las tradicionales rotondas. Este sistema ya se utiliza cada vez más en Estados Unidos, donde los resultados muestran mejoras en la seguridad vial y en la fluidez del tránsito.
La idea surge de la necesidad de modernizar la red de rutas en el país y ofrecer una alternativa más eficiente. En EE.UU., el Departamento de Transporte asegura que este esquema reduce la cantidad de choques y, sobre todo, la gravedad de los accidentes. “Es un cambio de paradigma que apunta a salvar vidas”, explicaron autoridades de tránsito norteamericanas.
Cómo funciona este sistema vial
El cruce de rutas alternativo consiste en rediseñar la circulación de los vehículos en intersecciones con alto flujo, eliminando la rotonda clásica y organizando los accesos con carriles diferenciados. El sistema obliga a los autos a realizar giros controlados que reducen la velocidad y disminuyen la posibilidad de choques frontales.
De acuerdo con los expertos, la clave está en simplificar los movimientos de los conductores y evitar maniobras imprevistas. De esa forma, los cruces de ruta permiten que el tránsito sea más previsible y se reduzca la congestión en horarios pico. “Al eliminar la rotonda y ordenar las trayectorias, los conductores enfrentan menos puntos de conflicto”, indicaron ingenieros viales estadounidenses.
Ventajas frente a las rotondas
En Estados Unidos, donde este sistema se viene expandiendo en la última década, los registros oficiales muestran una caída de entre el 30% y 40% en la cantidad de accidentes graves en las zonas donde se instalaron cruces de ruta. Otro dato relevante es la mejora en la capacidad de las intersecciones: los tiempos de espera en semáforos disminuyeron y los embotellamientos fueron notablemente menores.
En Argentina, especialistas advierten que las rotondas muchas veces no cumplen su función de ordenar el tránsito, ya que se saturan rápidamente y generan choques por falta de prioridad. El nuevo modelo, en cambio, busca dar respuestas a esas falencias. “Este tipo de cruces mejoran la seguridad y optimizan los flujos vehiculares”, remarcaron autoridades del sector.
¿Puede aplicarse en la Argentina?
La posibilidad de implementar este esquema en rutas nacionales y provinciales está siendo analizada por organismos de transporte y vialidad. El desafío, sin embargo, es la inversión en infraestructura que demandaría. Adaptar la red actual requeriría rediseñar intersecciones y construir accesos especiales, lo que implicaría un presupuesto elevado.
Aun así, expertos consideran que el costo podría compensarse con la reducción de accidentes y el ahorro en mantenimiento vial a largo plazo. Además, señalan que los usuarios de rutas ya están acostumbrados a convivir con diferentes modelos de intersecciones, lo que facilitaría la transición. Según Infobae, en varias provincias ya se estudia su viabilidad como parte de los planes de modernización vial.
Impacto del nuevo sistema vial en Argentina
De concretarse su implementación, el sistema vial de cruces de ruta podría significar un salto en la seguridad y eficiencia de la red argentina, marcando el inicio de una transformación en la manera de circular. Con los antecedentes positivos en Estados Unidos, su llegada al país abriría el debate sobre cómo debe planificarse el tránsito del futuro y qué inversiones son prioritarias para reducir los accidentes.