Un devastador terremoto de magnitud 6.0 sacudió el este de Afganistán, dejando un saldo preliminar de más de 800 fallecidos y 2.500 heridos, según confirmaron autoridades talibanes.
El sismo, ocurrido el domingo por la noche, afectó principalmente las zonas montañosas de la provincia de Kunar, donde comunidades enteras quedaron aisladas por deslizamientos de tierra y caminos destruidos.
Acceso Dificultoso y Esfuerzos de Rescate en Zones Montañosas
Según informó The New York Times, el epicentro del terremoto se situó cerca de Jalalabad, pero la mayor destrucción se registró en la provincia de Kunar, al norte de la ciudad. Homa Nader, jefa en funciones de la Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja en Afganistán, detalló que los equipos de rescate tardaron cuatro horas en recorrer 56 kilómetros hasta el distrito de Nur Gal, la zona más afectada. Un pueblo, Mazar Dara, estaba completamente bloqueado y solo accessible por helicóptero, complicando las labores de asistencia.
Crisis Humanitaria Agravada en un País Devastado
El terremoto profundiza una de las crisis humanitarias más graves del mundo. Según la ONU, Afganistán tiene menos del 30% de sus necesidades humanitarias cubiertas para 2025, con más de la mitad de sus 42 millones de habitantes requiring ayuda. La situación se ha agravado desde que los talibanes retomaron el poder en 2021, con una drástica reducción de la ayuda internacional. Estados Unidos, que proporcionaba el 45% de la ayuda, ha suspendido casi todas sus aportaciones bajo la administración Trump.
Respuesta Internacional y Desafíos Logísticos
Varios países, including Irán, India, Japón y la Unión Europea, se han comprometido a enviar ayuda, según Hafiz Zia Ahmad Takal, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores afgano. El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó sus condolencias y aseguró que el equipo de la organización «no escatimará esfuerzos para ayudar a quienes lo necesiten». El terremoto, de solo 8 kilómetros de profundidad, fue particularmente destructivo debido a su proximidad a la superficie, causando el colapso de viviendas de adobe y ladrillo en decenas de aldeas. Información extraída del medio The New York Time.