Una dieta mal aplicada puede contradecir los efectos positivos en la longevidad y el bienestar. Los especialistas advierten sobre los carbohidratos más dañinos.
En los últimos años, la restricción calórica se estudió como estrategia para prolongar la vida. Sin embargo, expertos en salud advierten que no alcanza con comer menos, sino que importa qué se come y cómo se distribuyen las comidas.
De acuerdo con los especialistas, la clave está en priorizar alimentos naturales y evitar aquellos que favorecen la obesidad y las enfermedades crónicas. El desafío actual no es solo vivir más tiempo, sino hacerlo con calidad de vida.
Según C5N , los casos de obesidad se multiplicaron por siete en los últimos 40 años en el mundo, lo que vuelve urgente una revisión de los hábitos alimentarios.
Ayuno intermitente: cuándo y qué comer
El ayuno intermitente se popularizó como una herramienta para perder peso y mejorar la salud metabólica. Pero su efectividad no depende solo del tiempo sin comer, sino de qué se consume al romper el ayuno.
Los carbohidratos refinados —como pan blanco, cereales azucarados, bollería industrial y bebidas endulzadas— son los principales saboteadores de esta práctica. Ingerirlos en grandes cantidades provoca un pico de glucosa e insulina que anula los beneficios en sensibilidad a la insulina y autofagia, procesos vinculados a la longevidad.
El rol de las grasas y los ultraprocesados
Otro error frecuente es combinar el ayuno con comidas cargadas de grasas poco saludables. Snacks fritos, comidas rápidas o productos con aceites hidrogenados generan inflamación crónica, un factor clave en el envejecimiento y en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares y diabetes.
De esta manera, una mala elección de alimentos en la ventana de ingesta puede reducir drásticamente el impacto positivo del ayuno intermitente.
Cómo potenciar sus beneficios
Para obtener resultados reales, los especialistas recomiendan romper el ayuno con:
- Proteínas de calidad (huevos, pescado).
- Grasas saludables (aguacate, aceite de oliva virgen extra).
- Fibra abundante (vegetales y frutas enteras).
El verdadero impacto del ayuno intermitente sobre la longevidad depende de cuándo y qué se come. La disciplina nutricional es el factor determinante para que esta práctica favorezca la salud y el bienestar a largo plazo.
El ayuno intermitente puede ser una herramienta efectiva para mejorar la salud y extender la longevidad, pero solo si se acompaña de una alimentación equilibrada y consciente.




