Pablo Daniel Laurta enfrentará este jueves a la Justicia cordobesa por el brutal doble femicidio de Luna Giardina y Mariel Zamudio.
El acusado, que ya tenía antecedentes por violencia de género contra su expareja, declarará desde las 11 en Tribunales II en un caso que conmocionó a la provincia.
La Declaración Indagatoria y los Cargos
El Ministerio Público Fiscal de Córdoba confirmó los detalles de la declaración. Pablo Laurta prestará declaración indagatoria de manera presencial. Su defensora pública, Alfonsina Muñiz, había solicitado específicamente esta modalidad.
Las autoridades trasladaron al acusado desde la cárcel de Cruz del Eje para que enfrente múltiples cargos. La Fiscalía lo acusa de homicidio doblemente calificado por el vínculo y por mediar violencia de género, lo que configura femicidio.
Estos cargos se suman a otros dos delitos graves: homicidio criminis causa y sustracción de un menor de edad. El Código Penal establece para todos estos delitos una pena máxima de prisión perpetua.
Los Antecedentes de Violencia y el Fatal Desenlace
Luna Giardina había denunciado en múltiples oportunidades a Laurta por violencia física, psicológica y sexual. En 2023, la Justicia le había otorgado botón antipánico y restricción de acercamiento, medidas que el acusado violó en varias oportunidades. Pese a este historial, una pericia determinó que «comprendía la criminalidad de sus actos» y fue liberado en febrero de 2024. El 11 de octubre, Laurta cruzó ilegalmente desde Uruguay, ingresó al domicilio de su expareja y disparó en la cabeza a ambas víctimas.
La Huida y la Otra Causa Pendiente
Tras cometer el doble femicidio, Laurta huyó con el hijo que tenía en común con Luna, siendo detenido pocas horas después en Entre Ríos. Allí, el menor quedó bajo resguardo de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia. Además del caso cordobés, el acusado enfrenta otra causa en Entre Ríos por el homicidio del remisero Martín Sebastián Palacios, por la que también cumple prisión preventiva.
La declaración de Laurta marca un paso crucial en la búsqueda de justicia para Luna y Mariel, cuyas muertes exponen una vez más las fallas del sistema para proteger a las víctimas de violencia de género. El caso refleja la peligrosidad de los agresores reincidentes y la necesidad de mecanismos más efectivos para prevenir femicidios en un contexto de alarmante violencia machista. Información extraída del medio La17.




