El último cumpleaños de Diego Maradona, marcado por la tristeza y la soledad.
A 65 años de su nacimiento, se recuerda la última aparición pública de Diego Maradona, marcada por la emoción, el deterioro físico y una profunda soledad.
Un cumpleaños que anticipó el adiós
Un 30 de octubre de 2020, el mundo del fútbol fue testigo de una imagen que quedaría grabada para siempre. Diego Armando Maradona, el ídolo eterno, cumplía 60 años, pero su estado de salud y su semblante reflejaban una lucha interna que iba mucho más allá del campo de juego.
Aquel día, Gimnasia y Esgrima La Plata debutaba ante Patronato en la Copa de la Liga Profesional. En medio de la pandemia y tras 228 días de inactividad, Maradona decidió presentarse igual. Aunque sus allegados intentaron disuadirlo, Diego insistió en estar con su equipo, pese a su evidente fragilidad.
En su entrada al estadio del Bosque, se apoyó en sus ayudantes para caminar. Fue recibido por Marcelo Tinelli, entonces presidente de la Liga Profesional, y Claudio “Chiqui” Tapia, quienes le entregaron una placa conmemorativa. Lo abrazaron, lo aplaudieron, y muchos sintieron que esa podría ser su última vez.
Según recordó Canal 12 Web, Maradona apenas pudo mantenerse en pie. A los pocos minutos del inicio del partido, regresó a su casa. Esa fue su última aparición pública.
La noche previa y un deseo incumplido
La noche anterior, Diego había pasado su cumpleaños en el Country Campos de Roca, en Brandsen, acompañado solo por su hija Jana, la única de sus hijos presente. Según su entorno, había consumido alcohol y se encontraba malhumorado y cansado.
Su ayudante Sebastián Méndez contó años después:
“Yo quería que estuviera en la cancha, pero me lo reproché. Deberíamos haberlo dejado tranquilo, era su cumpleaños, podía verlo por la tele”.
También lo visitó Jorge Broun, entonces arquero de Gimnasia, quien intentó levantarle el ánimo. Afuera, los hinchas del Lobo lo aclamaban a los gritos, y Diego, conmovido, salió brevemente a saludarlos.
Su asistente personal, Christian Pomargo, relató luego ante la Justicia que Maradona estaba triste porque su gran deseo era celebrar su cumpleaños con todos sus hijos. Pero ese reencuentro nunca ocurrió.
“Entró, saludó y se fue. Era su cumpleaños 60, pero él ya no estaba bien”, recordó Pomargo.
Un símbolo eterno del fútbol y la humanidad
Maradona dejó ese día una imagen que conmovió al mundo entero: un genio debilitado, sostenido por otros, con la mirada perdida, recibiendo homenajes que ya no alcanzaba a disfrutar. Apenas 26 días después, el 25 de noviembre de 2020, la noticia de su muerte paralizaría al planeta.
A 65 años de su nacimiento, Diego sigue siendo leyenda y mito, pero su último cumpleaños quedó como el retrato más humano y doloroso del ídolo: un hombre que dio todo por el fútbol, pero que no pudo escapar a la soledad.




