En un giro significativo en las relaciones comerciales entre ambas potencias, los cancilleres de Brasil y Estados Unidos mantuvieron un encuentro clave para destrabar las negociaciones sobre los aranceles del 50% que Washington impuso a las exportaciones brasileñas.
Según la información reportada por el medio DW, la reunión se produjo en el marco de la cumbre del G7 en Canadá, marcando un avance concreto tras meses de tensiones diplomáticas.
Un Diálogo en el Marco del G7
El canciller brasileño, Mauro Vieira, y su par estadounidense, Marco Rubio, sostuvieron una conversación bilateral este miércoles en Niagara-on-the-Lake, Canadá. Este encuentro, que se dio al margen de la reunión ministerial del G7, tuvo como objetivo central evaluar el estado actual de las negociaciones comerciales. Inmediatamente después, la cancillería brasileña confirmó que los diplomáticos acordaron celebrar una nueva reunión presencial en las próximas semanas para impulsar el diálogo y destrabar los puntos de fricción.
Los Orígenes de la Medida y la Respuesta Brasileña
La situación se desencadenó cuando la Administración Trump impuso en agosto un arancel adicional del 50% sobre una amplia gama de productos brasileños, una medida presentada como represalia por la situación judicial del expresidente Jair Bolsonaro. Frente a esto, el Gobierno de Lula da Silva argumenta que la restricción carece de sentido económico, destacando que Estados Unidos mantiene un superávit comercial con Brasil desde hace años. Cabe señalar que las actuales gestiones responden a un mandato directo de los presidentes Lula y Trump, quienes abordaron el tema durante un encuentro en Malasia el mes pasado.
Señales de Flexibilización y Próximos Pasos
Recientemente, han surgido indicios de una posible flexibilización por parte de Washington. De hecho, el martes, el presidente Trump mencionó en sus redes sociales la posibilidad de reducir algunos aranceles al café importado, un producto clave para las exportaciones brasileñas. No obstante, el canciller Vieira aclaró que aún esperan una comunicación formal sobre este punto. En definitiva, este diálogo renovado representa un cambio notable tras un período de fuertes tensiones que incluyeron sanciones personales a funcionarios, abriendo una puerta a la normalización de las relaciones comerciales entre ambos países.




