El club de Boedo resolvió a último momento un nuevo conflicto institucional al abonar el sueldo adeudado al defensor colombiano Jhohan Romaña, evitando así que el jugador pudiera ejercer su derecho a quedar en libertad de acción.
El pago se concretó durante la mañana del sábado, apenas 48 horas después de que el futbolista intimara al club por segunda vez en dos meses. Según la información del medio TyC Sports, de la cual se extrae este análisis, la dirigencia logró desactivar una crisis que se sumaba a las 14 inhibiciones FIFA que actualmente pesan sobre la institución.
Una Carrera Contra el Tiempo para Evitar la Libertad
Romaña había presentado formalmente una intimación el viernes por la mañana, reclamando el pago de su sueldo correspondiente a octubre que el club aún mantenía en deuda. Según el reglamento vigente, si tras 48 horas el club no regularizaba la situación, el defensor podía considerarse en libertad de acción y abandonar la institución sin costo para ningún posible comprador. El pago se confirmó desde Futbolistas Agremiados, cerrando así otro capítulo de tensión entre el jugador y la debilitada Comisión Directiva.
Un Contexto de Profunda Crisis Institucional
Este episodio se enmarca en una situación crítica para el club de Boedo, que actualmente enfrenta múltiples frentes. Hace pocos días, San Lorenzo sumó dos inhibiciones más ante la FIFA, totalizando 14 y consolidándose como el club más sancionado de todo el continente. Paralelamente, la institución afronta un pedido de quiebra por parte del fondo suizo AIS Investment Fund, por una deuda de 4.7 millones de dólares, mientras la incertidumbre sobre su futuro institucional crece día a día.
Romaña Desafectado del Equipo
Aunque la situación salarial se resolvió, Romaña no estará presente en el partido ante Sarmiento. El defensor fue desafectado de la concentración oficialmente por «molestias físicas», aunque la decisión llegó horas después de que se conociera su intimación al club. Mientras tanto, el plantel profesional continúa manifestando su malestar a través de comunicados, calificando recientemente la situación como «insostenible», en un claro mensaje a la dirigencia que refleja la profundidad de la crisis que atraviesa el Ciclón.




