La tradicional mesa dulce de Navidad vuelve a estar bajo la lupa debido a un incremento general del 27% respecto al año pasado, aunque con fuertes disparidades entre los productos que la integran
El relevamiento —difundido según C5N — advierte un consumo más cauteloso y compras que se concentrarán en los días previos a la fiesta.
Aumentos desparejos y consumo contenido
Un informe de la consultora Focus Market detalló que la canasta de 12 artículos típicos de la mesa dulce alcanza un valor total de $95.401, frente a los $75.013 del 2024. Sin embargo, las variaciones muestran diferencias notables, que van desde apenas un 1% hasta saltos que llegan al 47%.
Entre los productos con mayores incrementos destacan:
- Torta española de frutos secos (200 g): +47%
- Pan dulce con frutas (400 g): +44%
- Turrón español blando de almendra (200 g): +38%
En contraste, otros artículos muestran subas mucho más moderadas:
- Pan dulce con chips (400 g): +9%
- Garrapiñadas de maní (80 g): +7%
- Champagne (750 cc): +1%
El informe remarca que dos de los tres productos que más aumentaron son importados, por lo que su precio está más condicionado por los costos logísticos y la variación del tipo de cambio. En otros casos, la presencia de ofertas o promociones impactó en los valores del relevamiento.
Precios promedio de los productos más buscados
En esta temporada, los valores promedio quedaron de la siguiente manera:
- Pan dulce con frutas (400 g): $5.750
- Turrón de almendras (90 g): $4.940
- Budín con frutas (215 g): $3.758
- Garrapiñadas de maní (80 g): $1.350
- Sidra (720 cc): $2.299
De acuerdo con el director de Focus Market, Damián Di Pace, esta dinámica de precios refleja “la presión competitiva entre comercios y un consumo que sigue contenido”, lo que explica por qué ciertos productos se mantuvieron por debajo de la inflación general.
Hábitos de compra y expectativas económicas
El informe también reveló que el 44% de las familias planea realizar sus compras una semana antes de Navidad, mientras que solo un 27% se anticipará un mes. Esta conducta, según el análisis, se diferencia de otros momentos de alta inflación donde predominaba el adelantamiento del consumo.
Di Pace explicó que “en un contexto de demanda débil y expectativas moderadas, empresas y consumidores evitan adelantarse”, lo que muestra una economía en proceso de reacomodamiento.
La canasta navideña muestra aumentos que, si bien no replican los picos inflacionarios de otros años, mantienen una fuerte dispersión entre categorías. La combinación de productos importados, promociones y una demanda prudente define una Navidad donde el bolsillo continúa siendo un factor central en la mesa de los argentinos.




