La Iglesia y Amnistía Argentina expresaron su repudio a la represión sufrida en las últimas horas por los integrantes de la comunidad mapuche “Lof en Resistencia Cushamen” de la zona cordillerana de Chubut por parte de fuerzas federales y provinciales, en el marco de un operativo que dejó al menos tres personas heridas.
“El respeto por los derechos de los pueblos indígenas no se logrará criminalizando sus reclamos. Se deben encontrar vías pacíficas para solucionar los conflictos”, advirtió en un comunicado el Equipo Nacional de Pastoral Aborigen (Endepa), un organismo eclesial católico al servicio de los pueblos indígenas.
En ese marco, el equipo reclamó tanto al gobierno nacional como al chubutense “el respeto por los derechos de los pueblos indígenas, consagrados por la Constitución Nacional y los tratados internacionales” y criticó que se priorice “el interés de extranjeros por sobre el de los pueblos indígenas, preexistentes al Estado argentino”.
“No será fácil solucionar los múltiples reclamos que decenas de pueblos indígenas realizan hace tantos años, pero es el único camino que podrá proporcionar el respeto de los derechos en juego. La violencia y la represión estatal por otro lado, solo pueden generar más injusticia y menos paz social”, concluyó en el comunicado.
Por su parte, Amnistía Internacional Argentina también repudió la represión contra el pueblo mapuche, en el marco del reclamo de los pobladores de tierras ancestrales que actualmente están en disputa con el grupo empresarial Benetton.
La organización internacional, con sede en la Argentina, dijo que los sucesos de ayer se dan “en un contexto de creciente criminalización de la protesta y particularmente de estigmatización del pueblo mapuche”.