Aquel 4 de noviembre, el submarinista, oriundo de Salta, se había comunicado con sus diez hermanos para contarles que estuvo cerca de las Malvinas y también les informó que volvería a tierra los primeros días de diciembre. «A fines de octubre se comunicó con nosotros y nos dijo que se iba en el submarino a Ushuaia», contó la hermana del suboficial, Jésica Medina, en diálogo con La Gaceta.
La familiar calificó de «raro» el mensaje, pero en ese momento no le dio importancia. «Nos decía que los estaba buscando un helicóptero británico y un buque chileno, pero lamentablemente no seguimos con esa conversación, quedó ahí. Ese fue el último mensaje», relató.
«Yo no sé si se habrán acercado mucho a Malvinas, no sé cómo será el tema político. Eso es lo que nos dijo y es lo que nos queda a nosotros», reflexionó Jésica.
El vocero de la Armada, Enrique Balbi, se mantuvo en la versión oficial y aclaró: «No hay nada político detrás del tema, me parece». Sin embargo, reconoció que es muy común el sobrevuelo de helicópteros. Fue en la conferencia de prensa que dio el mediodía del miércoles, después de que el martes se suspendiera el contacto con la prensa.
«El canal de Beagle es una zona de permanente operación de buques y helicópteros chilenos. A lo largo de estos 15 años, a partir del tratado de paz, hay permanente ejercicios combinados entre nuestra Armada y la de Chile», explicó el vocero.
Jésica explicó por qué decidió dar a conocer el diálogo con su hermano a la prensa antes que informarlo a la Armada. La hermana del submarinistas dijo que busca que el WhatsApp llegue a manos de la jueza federal de Caleta Olivia, Marta Yáñez, que se encuentra a cargo de la investigación. «Yo creo que no somos la única familia que tiene algo así, me parece que son muchísimas», concluyó.