En pocos minutos, se volvió en la nueva celebridad de las redes sociales.
Transcurrían ocho minutos del segundo tiempo en el Gigante de Arroyito. Rosario Central ya le había empatado el partido a River con un tanto de Agustín Allione, con la complicidad de Franco Armani. Desde una de las tribunas, una mujer saltó al césped, se quitó la remera, y comenzó a correr entre los jugadores, provocando la sorpresa de los protagonistas y de todos los espectadores.
La infiltrada, con un bodypainting con los colores del «canalla» (azul y amarillo) y Newell’s (rojo y negro) en el torso, y pintada con los colores de River y Boca de la cintura para abajo, atravesó el campo a lo largo, llegó hasta el área que defendía el local y saludó repetidamente a los hinchas locales.
Uno de los policías afectados al operativo intentó interceptarla, pero no pudo. Enseguida, varios uniformados se sumaron al intento y, cerca del círculo central, el objetivo quedó cumplido. La joven fue rodeada y acompañada fuera de los límites del campo de juego y el árbitro Andrés Merlos pudo reiniciar el encuentro.
¿Quién es la mujer se robó todos los comentarios en las redes sociales? Según lo que tenía escrito en su cuerpo, se trata de Sheila Stanolli. En su cuenta de Facebook cuenta que se formó como personal trainer, mientras que Instagram, la red que más utiliza relata que es «amante de la creación, yegua por naturaleza, apocalíptica, cristiana y seguidora de la luz».
Lo cierto es que apenas unos segundos le sirvieron para convertirse famosa y sumar algunos seguidores a sus cuentas de las redes. Las cámaras la siguieron y hoy todos los medios hablan de ella.
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