Las empresas pesqueras Iberpesca, Food Partner, La Costillita, Cabo Vírgenes y Veraz prevén invertir 110 millones de pesos en desarrollar un sistema para tratar el pasivo ambiental que generan los líquidos de las plantas de procesamiento. Da respuesta al decreto que prohíbe vuelcos al río atendiendo la cuestión ambiental.
El Gobierno de Chubut, a través del Ministerio de Ambiente y Control del Desarrollo Sustentable, ha impulsado un plan de gestión ambiental de los recursos hídricos de la Provincia. El mismo incluye la puesta en vigencia de un decreto que regula los vuelcos (efluentes líquidos) a cuerpos de agua de la provincia (1540/16 llamado “Decreto de Vuelcos”).
A partir de allí se comenzó un trabajo con la industria pesquera en particular para tratar correctamente sus efluentes y, en especial en la ciudad de Rawson, evitar los vuelcos fuera de parámetros al río Chubut.
De esta manera y a través de un trabajo conjunto con la industria y la Municipalidad de Rawson durante más de tres años, hoy casi la totalidad de la industria pesquera de Rawson avanza en un tratamiento secundario y final de sus efluentes en lagunas con una inversión en su totalidad privada de más de 110 millones de pesos.
Se trata de un emprendimiento denominado Rawson Ambiental, el cual integran las empresas pesqueras Iberpesca SA, Food Partner SA, La Costillita SA, Cabo Vírgenes SRL y Veraz SA.
Recorrida por el predio
Esta semana el gobernador de la provincia de Chubut, Mariano Arcioni y la intendenta de Rawson, Rossana Artero, concretaron una agenda conjunta en la capital provincial que incluyó la recorrida por las obras del sistema de tratamiento de efluentes de la industria pesquera. Además, estuvieron presentes el ministro de Ambiente y Control del Desarrollo Sustentable, Eduardo Arzani, y los empresarios Eduardo del Río, Fernando Damboriana y Carlos Molina, entre otros.
Respecto de este ambicioso proyecto que tiene un gran impacto en beneficio del medio ambiente y viene a dar respuesta a una larga demanda de la comunidad capitalina, que es atender el pasivo ambiental de la pesca, es que las empresas asociadas resuelven la realización de una única gestión de efluentes líquidos para adecuarse al requerimiento del gobierno provincial. Para ello adquirieron un predio de 50 hectáreas, en donde se depurarán los líquidos, a 4 kilómetros de la ciudad de Rawson y 5 kilómetros del puerto homónimo y Playa Unión.
Tratamiento y disposición final
La solución, proyectada por el Estudio de Ingeniería Ambiental EIA Rawson, contempla la adecuación primaria de efluentes en cada establecimiento y el transporte de efluentes de cada planta a estaciones de bombeo para conducir la totalidad de los líquidos industriales a un único sistema de tratamiento y disposición final.
De esta manera, los efluentes de cada empresa, una vez acondicionados se descargarán en estaciones de bombeo que los transportarán por un acueducto de 7,9 kilómetros hasta el sitio en que se localizará el sistema de tratamiento secundario biológico y la disposición final de los mismos.
Vale destacar que como forma de tratamiento biológico secundario habrá un estanque anaeróbico seguido de dos estanques aeróbicos parcialmente mezclados mediante aireadores mecánicos de superficie. Estos cuencos, que ocupan una superficie de 3 hectáreas, serán impermeabilizados con geomembrana y contarán con delimitación de acceso mediante cerco perimetral. Para poder llevar a cabo el tratamiento mencionado, se deberá contar con energía eléctrica que alimente al sistema de aireadores a instalar, por lo que se construirá un ramal de media tensión de aproximadamente 4 kilómetros, con subestación transformadora de 100 KVA.
Con todo, la disposición final se prevé a través de reservorios de evaporación e infiltración regulada, los que ocuparán una superficie en horizonte de proyecto de 23 hectáreas.
Según se indicó, el sistema conjunto reduce los costos fijos de operación, incrementa el margen de fiabilidad del sistema y sobre todo, no afecta el recurso hídrico Río Chubut ni la costa marítima de Playa Unión ya que los líquidos se transportarán a varios kilómetros de los centros poblados preservando la calidad de las aguas del río.
Estas obras de saneamiento ambiental implican que las empresas intervinientes deban invertir, para completar el proyecto, un monto estimado en 110 millones de pesos.
“Cambio de mentalidad”
Por su parte el ministro de Ambiente, Eduardo Arzani, en declaraciones a REVISTA PUERTO destacó la decisión de las empresas de encontrarle una salida conjunta a un problema que venía de arrastre. “Tener un sistema de tratamiento de efluentes líquidos era una asignatura que estaba pendiente. Que las propias pesqueras estén dispuestas a invertir 110 millones en un sistema que no les genera renta, sino que es para atender el pasivo ambiental, demuestra que hay un cambio de mentalidad en el sector privado y hay que destacarlo”, enfatizó.
“Habrá un tratamiento primario en la planta con filtrado y sedimentación. Después hay dos ductos, uno norte y otro sur, con capacidad de bombeo desde donde se impulsan los líquidos hasta la planta de tratamiento para su posterior disposición final por evaporación o filtración. Después se analizará la alternativa de algún tipo de reúso de esas aguas”, precisó Arzani.
El Ministro de Ambiente anticipó en cuanto a los desechos sólidos del langostino que “hay inversores internacionales interesados en desarrollar productos a partir de esos desechos. Pasó un grupo australiano que estuvo haciendo pruebas, en la búsqueda de utilizar los desechos como un recurso. Empresarios de Chile también están interesados y están pensando en procesar esos desechos. Estimo que en un lapso de 12 o 24 meses vamos a tener una planta instalada en la región usando ese material para hacer proteínas. Ya hay vinculaciones directas con las empresas pesqueras, lo cual es un avance importante”, afirmó.
Revista Puerto