El Gobierno necesita que Legislatura apruebe ampliar el monto de los Ticadep. Es el bono creado para pagar la deuda con proveedores del Estado. Algunos llevan cuatro años sin cobrar. La intención es pagar con ese mecanismo a los proveedores de la obra social provincial.
El planteo lo hizo el último martes el ministro de Economía, Luis Tarrío, durante la reunión que encabezó el gobernador Mariano Arcioni con todos los diputados provinciales. Como informó EL CHUBUT en su edición de ayer, el pedido expreso a los integrantes de la Legislatura es avanzar con la Ley 52/19 para autorizar los montos de los Títulos de Cancelación de Deuda Pública Provincial (Ticadep), llevando el valor a un total de 3.500 millones de pesos.
Con esos bonos, el Gobierno pretende hacer frente al pago de las prestaciones brindadas por los profesionales de la salud a la obra social Seros, según afirmaron a este diario tres diputados que participaron de la reunión con Arcioni y que escucharon el planteo realizado por el ministro Tarrío.
SE DEBEN DEPOSITAR 200 MILLONES EN SEROS
El Ejecutivo Provincial debería depositar antes del miércoles de la semana entrante, una suma superior a los 200 millones de pesos. Eso sería sólo para cubrir la deuda exigible de julio a los prestadores de la obra social.
Sin embargo, fuentes del Ministerio de Economía dejaron trascender que lejos están de asegurar un monto al menos similar para esa fecha, mucho menos aún cuando todavía no tienen previsión sobre lo que será afrontar el pago de sueldos de julio.
PROVEEDORES SIGUEN ESPERANDO
Fue en marzo de este año cuando la Nación autorizó a Chubut a la emisión del bono para pagar a los proveedores: los Ticadep. Y la deuda en algunos casos se remontaba al año 2015.
Hace algunas semanas, el dirigente de la Fech, Rubén Villagra, había afirmado a EL CHUBUT que pese a que el Estado cuenta desde marzo con la herramienta de los Ticadep, «todavía no se ha hecho casi nada; se ha hecho con algunas constructoras», pero a esta altura, la deuda del Estado provincial con los proveedores «está totalmente licuada».
Por aquel entonces, el ministro Tarrío le había adelantado a Villagra que al menos habría un pequeño reconocimiento de los intereses pero sólo de este año. Aún no se avanzó con eso y mucho menos con los pagos a los proveedores que, en muchos casos, dan por perdido lo que el Estado les debe.