Chile y Argentina enfrentarán un escenario político y económico complejo, «aunque con flancos de debilidad y desafíos diferentes» en el contexto internacional dominado por la espiral de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, potenciado además por la fragilidad europea y un posible «Brexit duro» a la vuelta de la esquina, señala el economista, consultor y docente chileno, Jorge Gajardo.
«Una recesión mundial parece segura. De ello dan cuenta la ralentización de Alemania, el estado de la economía Italiana y el bloque europeo, las menores tasas de crecimiento chinas, la casi recesiva economía brasileña y otros indicadores financieros, advierte el experto en charla telefónica con Télam.
Consultado sobre el impacto regional de ese diagnóstico, el economista señala que «Chile y Argentina han sido en los últimos años ejemplos paradigmáticos de progresismo y neoliberalismo en America Latina, región que osciló en las últimas décadas entre ambos modelos».
«Hoy, sin embargo -agrega- asistimos a un nuevo ajuste de placas con el triunfo en México del presidente López Obrador y el posible advenimiento de Alberto Fernandez en Argentina, quebrando una tendencia que parecía acercarse a la globalización neoliberal».
El economista explica que ya no estamos en la época de relativa fortaleza económica de ambos vecinos, «la del kirchnerismo post crisis de 2001, con su modelo de estado desarrollista de inspiración peronista, o la del Chile de los 90´s que aún agota sus bases de crecimiento subsidiado por el consumo depredatorio de sus recursos naturales».
Por lo anterior, Argentina y Chile enfrentan un escenario complejo, pero que deberán enfrentar desde flancos de debilidad distintos, y por consiguiente con desafíos que serán también diferentes.
Consultado sobre las «debilidades», Gajardo advierte que la muy probable recesión mundial y guerra comercial será enfrentada por Argentina en un contexto de indicadores económicos desfavorables (inflación, ingresos, crecimiento, pobreza y finanzas públicas).
«Además, lo hará sin acceso al crédito, paradójicamente en una coyuntura de tasas de interés bajísimas a nivel mundial y con un endeudamiento récord que deberá servir a partir de 2021, e incluso con sus principales productos de exportación con precios internacionales aún más deprimidos», agrega.
«Chile por su parte -continúa-, aunque más vulnerable a los shocks externos por su nivel de apertura, posee mecanismos automáticos de estabilización, como el tipo de cambio libre, una política monetaria en base a metas de inflación».