Con total normalidad y alta participación, a las 8 de la mañana (las cuatro en la Argentina) se abrió el centro de votación en el Colegio Mayor, donde se instalaron 12 mesas, cada una con sus respectivas autoridades y fiscales partidarios.
En una jornada otoñal que mucho tiene de primavera, con sol radiante, el comentario de quienes participan en el operativo es la impresionante respuesta de los 29.000 residentes argentinos inscriptos en esta jurisdicción.
Solo en la primera hora, más de 200 personas se acercaron a votar, en una respuesta notable por su entusiasmo. Lejos de aminorar, el ritmo se acrecentó en la medida en que avanzaba la jornada. Cerca de las 12, LA NACION contabilizó 147 personas esperando su turno.
José, un argentino residente en Murcia, en el sur de la península, fue el primero en emitir su sufragio. Lo hizo luego de recorrer los 400 kilómetros que separaban su domicilio del Colegio Mayor Argentino, donde se instaló el centro electoral.
Amalia Karger, de 93 años, fue aplaudida por las autoridades de mesa y los fiscales partidarios en el momento de emitir su voto. Sonriente, la mujer cumplió con su cometido y subrayó el compromiso con la jornada.
Organizado por el Consulado en esta ciudad, el centro se organizó en 12 mesas electorales. Cada una de ellas con su autoridad de mesa y fiscales por el Frente para Todos y Juntos por el Cambio. Corrillos de argentinos se forman en los alrededores de la residencia.
Al igual que en las elecciones legislativas de 2017 y por razones de espacio, se optó por instalar el centro de voto en el Colegio Mayor y no en la sede del Consulado para tener más amplitud y comodidad, previendo la respuesta ciudadana.
«Todo está resultando muy bien», dijo la cónsul general, Moira Wilkinson.
La emisión del voto en el exterior no es obligatoria. Las autoridades de mesa se reclutaron con una convocatoria voluntaria y la respuesta fue inmediata. Hay dos jefes de mesa para cada una de las doce urnas habilitadas, y todas ellas con sus fiscales partidarios.
En Barcelona, el mayor padrón
El entusiasmo se repite en Barcelona, la jurisdicción con mayor número de inscriptos: casi 35.000, según precisó a LA NACION el cónsul Alejandro Alonso.
En la capital catalana, el centro funciona en la sede del consulado, a una cuadra de la céntrica Plaza Cataluña. Organizado en 15 mesas, cada una con sus autoridades y sus fiscales partidarios.
El comentario generalizado es la alta participación. Antes del mediodía, ya habían votado más de 700 personas.
Luego de las 18 (hora española, las 14 en la Argentina) en que cierran las mesas, los datos se enviarán por sistema informático a Buenos Aires y luego las boletas viajarán por envío diplomático, con las garantías del caso.
A los votos que se emiten en los respectivos centros deben sumarse los enviados por correo. Entre Barcelona y Madrid suman más de 1600. En total, hay cerca de 385.000 argentinos en condiciones de votar en todo el mundo. Y buena parte de ese padrón reside en España.