Flamengo, que fue campeón en 1981 de la Copa Libertadores, buscará llegar tras 38 años de ausencia a una nueva final del máximo certamen de clubes de Sudamérica cuando reciba hoy a Gremio, tricampeón del torneo, en el partido desquite por una de las semifinales y cuyo vencedor jugará la instancia decisiva ante River Plate, que anoche eliminó a Boca Juniors.
El encuentro se desarrollará en el estadio Maracaná de Río de Janeiro, desde las 21.30, con el arbitraje del argentino Patricio Loustau, asistido por sus compatriotas Diego Bonfá y Gabriel Chade, mientras que a cargo del VAR estará el brasileño Raphael Claus.
El ganador de este encuentro jugará la final de la Copa Libertadores y el paso al mundial de clubes que organizará la FIFA en Qatar en diciembre ante River en el estadio Nacional de Santiago de Chile, el 23 de noviembre.
En el partido de ida jugado en Arena do Gremio, en Porto Alegre, igualaron 1 a 1, por lo tanto el que gane será finalista.
No obstante, si se repite el resultado habrá remates desde el punto penal, si igualan sin goles avanzará Flamengo por el valor doble del gol anotado de visitante, con igualdad de más de un tanto clasificará Gremio.