El documento se llama «Compromiso Argentino por el Desarrollo y la Solidaridad» contó con el apoyo de la multisectorial que participó del encuentro.
El presidente Alberto Fernández firmó hoy en la Casa de Gobierno con empresarios, representantes gremiales y de movimientos sociales el «Compromiso Argentino por el Desarrollo y la Solidaridad», que busca «consensos de largo plazo, que vayan más allá de un período presidencial y que incluyan metas compartidas y posibles de alcanzar en distintas etapas».
Voceros oficiales informaron que el Presidente explicó en la reunión que «la idea de este acuerdo, es empezar a lograr un diálogo franco para asumir los problemas que tenemos», y dijo que «toda la Argentina tiene problemas, está claro que algunos están más agobiados que otros, pero toda la Argentina tiene problemas».
«Estamos en un país que lleva dos años consecutivos de caída del consumo y más de veinte meses de caída de la actividad industrial, y esto hay que revertirlo rápidamente, el modo es que los industriales inviertan, que la industria crezca, que podamos exportar, que de ese modo generemos trabajo, que la economía vuelva a moverse como todos soñamos, y la idea es que lo hagamos entre todos», instó el mandatario.
En ese sentido, enfatizó que «valora» la puesta en marcha de esa mesa en la que «están sentados los actores de la Argentina, los que trabajan, los que invierten y producen y los que gobernamos», y añadió que «así van a hacer los cuatro años que vienen, trabajando juntos y tomando decisiones juntos».
Según precisaron, la agenda a llevar adelante, incluye entre otros temas prioritarios, un esquema de actualización de haberes jubilatorios y tarifas de servicios públicos, la creación de empleos de calidad, alentar la inversión productiva y las exportaciones con valor agregado, facilitar el acceso al crédito bancario para la vivienda y la producción, así como la promoción de las Pymes.
Destacó también que la futura discusión en el seno del Parlamento del próximo Presupuesto Nacional, «constituye una primera oportunidad para que, en el marco de un adecuado análisis de costos y recursos, los acuerdos a los que se hayan arribado en las mesas de diálogo puedan convertirse en políticas públicas operativas y de inmediata implementación».
El documento recibió el apoyo explícito de dos de las entidades que conforman la Mesa de Enlace -la Federación Agraria Argentina y de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro)-, ausentes en el encuentro de esta tarde en Casa Rosada.
Según precisaron fuentes gubernamentales, luego de la lectura del documento, además del Presidente y su Jefe de Gabinete, hablaron por el sindicalismo el líder de Camioneros, Hugo Moyano, el co-titular de la CGT, Héctor Daer, y el secretario general de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Esteban Castro.
Por los empresarios, según trascendió desde Casa Rosada, expusieron el titular de la UIA, Miguel Acevedo, además del empresario y referente de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), Alberto Grimoldi, un representante de las Pymes y un delegado de manteros.
Junto al primer mandatario, estuvieron presentes el Jefe de Gabinete Santiago Cafiero, los ministros, del Interior, Eduardo Wado de Pedro; de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Claudio Moroni; de Desarrollo Social, Daniel Arroyo; y de Agricultura, Ganadería y Pesca, Luis Basterra.
Asimismo, participaron representantes de los trabajadores de todos los sectores (de la CGT, las dos CTA y los sindicatos más duros) entre los que se encontraban Héctor Daer, Carlos Acuña, Hugo Moyano, Andrés Rodríguez, Sergio Palazzo, Omar Viviani, Hugo Yasky, Gerardo Martínez, Víctor Santa María, entre otros.
También estuvieron el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Miguel Acevedo, y representantes de cámaras empresariales entre las que se contaron la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas (Apyme), y la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Entre los representantes de los movimientos sociales, estuvieron referentes de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), Barrios de Pie, y el Frente Popular Darío Santillán, entre otras.
El documento
El gobierno nacional y referentes de los sectores empresarios, sindicales y de los movimientos sociales suscribieron un documento en el que asumieron «el compromiso de trabajar juntos» para enfrentar la situación de emergencia por la que atraviesa la Argentina, y sobre esa base, «construir un conjunto de consensos para lograr un desarrollo inclusivo y sostenible».
«La Nación atraviesa una situación de grave fragilidad económica y social. Necesitamos estar más unidos que nunca para enfrentarla y superarla», señaló el documento «Compromiso Argentino por el Desarrollo y la Solidaridad», que fue firmado durante un encuentro que encabezó el presidente Alberto Fernández en el salón «Eva Perón» de la Casa de Gobierno.
El documento señaló como uno de los problemas «urgentes» a abordar el del endeudamiento público, que «por su magnitud y la inmediatez de los compromisos de pago» representa un «claro desafío» para lograr una «resolución sustentable», y en ese marco expresó la «confianza y respaldo a la gestión que ante los acreedores privados y organismos internacionales realizará el nuevo gobierno argentino».
«La voluntad de pago requiere condiciones compatibles con la atención de la deuda social y el crecimiento de la economía, en el marco de una ética pública de las prioridades que ponga a la dignidad humana por encima de cualquier otro interés», ya que «sin ello, sería imposible cumplir con las obligaciones que asuma el país», manifestó.
Puntualizó que «no será la mera negociación de una administración», sino «una tarea colectiva de todo un país que reclama poner a la producción y al trabajo por encima de la especulación financiera y la fuga de capitales», y que permita «construir una nación solidaria, desarrollada y justa».
Motivados por el «deseo compartido de volver a ser una Patria unida, capaz de acrecentar el bienestar sobre la base del trabajo, la inversión productiva y una justa distribución de la riqueza», los distintos sectores señalaron luego su intención de empezar «por ofrecer respuestas a los últimos para llegar a todos», desde «lo más urgente para luego abordar juntos lo más importante».
El texto advirtió que «urgente es, en primer lugar, dar respuesta a la trágica deuda social con los argentinos y argentinas que sufren hambre y problemas de alimentación», y «ante el aumento abrupto de la pobreza» expresó el compromiso de «contribuir con un esfuerzo extraordinario a la obligación moral de poner en la mesa de todas nuestras familias el pan que a ninguna le debería faltar».
Los diferentes sectores destacaron que «juntos, sin uniformidad ni unanimidad, pero sí con un fuerte compromiso colectivo», aceptaron «el desafío de edificar consensos de largo plazo, que vayan más allá de un período presidencial», que incluyan «metas compartidas y posibles de alcanzar en distintas etapas», pero aclaran que «no se trata de un compendio de buenas intenciones, sino de logros y objetivos muy concretos».
Para procesar esos acuerdos, coincidieron en la necesidad de poner en marcha un Consejo Económico y Social que trate, en debates «multisectoriales e informados», una agenda en la que «se debe incluir como temas prioritarios un esquema equitativo y sustentable de actualización de haberes jubilatorios y tarifas de los servicios públicos».
«Somos conscientes del efecto devastador de la inflación sobre el salario, la inversión productiva y, en general, la tranquilidad de nuestros hogares», manifestaron en el texto, y por ello, «el reordenamiento fiscal y monetario que el Estado se ha comprometido a llevar adelante, se debe reforzar en su efectividad con el curso de conductas sectoriales responsables, en especial en lograr la estabilidad de precios».
Asimismo, se coincidió en el documento en «la importancia de crear más empleos de calidad y erradicar la precariedad, alentar la inversión productiva y las exportaciones de valor agregado, facilitar el acceso al crédito bancario para la vivienda y la producción, promover a las Pymes, mejorar la competitividad de la economía, alentar una integración con el Mercosur y el mundo, y vincular la ciencia con la creación de valor», entre otras metas, señaló Télam.