El número se desprende del último informe del Ministerio de Salud de ese país.
El número de muertos en Brasil en las últimas 24 horas fue de 383, por lo que la cantidad de fallecidos llega a 2.845 desde que la pandemia llegó a ese país. En cuento a la cantidad de infectados, superó los 40 mil casos, según datos del Ministerio de Salud el lunes por la tarde.
Los estados con el mayor número de casos son: Sao Paulo (14.580 casos y 1.037 muertes), Río de Janeiro (4.899-422), Ceará (3.482-198), Pernambuco (2.690) y Amazonas (2.160-185).
Actualmente, 11 estados tienen más de mil casos registrados de la enfermedad: São Paulo, Río de Janeiro, Minas Gerais, Espírito Santo, Paraná, Santa Catarina, Pernambuco, Ceará, Bahía, Maranhão y Amazonas.
Cuatro días después de despedir a su ministro de salud en plena pandemia, el presidente brasileño Jair Bolsonaro dijo este lunes que quiere que esta semana se ponga fin a las políticas de aislamiento social a nivel nacional, aunque muchos estados brasileños señalan que están comprometidos con ellas.
Casi todos los estados brasileños tienen las medidas de quedarse en casa vigentes, algunos hasta mediados de mayo. El principal tribunal del país falló que los gobernadores y alcaldes pueden tomar la decisión sobre las medidas de aislamiento social sin importar la postura del gobierno federal. Mientras tanto, Bolsonaro quiere que rápidamente se reabran para frenar el deterioro de la economía del país.
«Todo lo que se hace en exceso termina generando problemas. Estas medidas no llegaron a su objetivo en algunos estados», dijo Bolsonaro a la prensa frente a la residencia presidencial en Brasilia. «Espero que sea la última semana de esta cuarentena, de esta forma de luchar contra el virus», aseguró.
El presidente brasileño apoya un modelo menos restrictivo donde sólo los grupos de alto riesgo estén confinados en casa. Después de que el mandatario reemplazó al crítico Luiz Henrique Mandetta con Nelson Teich como ministro de salud, varios gobernadores y alcaldes indicaron que consideraban medidas de aislamiento más estrictas.
Teich había publicado previamente un artículo que defendía la cuarentena, pero no se ha expresado desde el ambiguo discurso de presentación del viernes y no es claro qué hará en el puesto.
Bolsonaro habló un día después de reunirse al aire libre con decenas de partidarios que quieren que cierre el congreso y tribunal supremo del país. Su presencia en dicha demostración genera extensa indignación en un país que soportó una dictadura militar entre 1964 y 1985.