“El consumo de tabaco favorece los cuadros gripales y las neuropatías de cualquier causa”, explicó el médico de familia Guillermo Espinosa(M.N. 104.293), presidente de la Asociación Argentina de Tabacología (AsAT).
Asimismo, es conocido que el hábito es tóxico y pone en riesgo a familiares o convivientes que están expuestos al humo, según publica Public Health England (PHE).
Espinosa también advirtió que“fumar disminuye las capacidades pulmonares y baja las defensas del sistema inmune de todo el tracto respiratorio y entonces genera condiciones más favorables para la expansión del COVID-19 y para que les vaya peor a los que se contagian”.
La información fue recabada de una encuesta realizada en pacientes de tres hospitales de Wuhan, China, la cual analizó los factores que llevaron a la progresión de la neumonía y la que reveló que los fumadores con coronavirus tienen más probabilidades de desarrollar una enfermedad grave.
“Fumar y vapear hace daño y favorecen infecciones”, remarcó Espinosa, coordinador del programa “Dejar de fumar” del Hospital Italiano.“Deben dejarlo, además, para no sobrecargar el sistema de salud, que ahora pide no hacer consultas presenciales”, aconsejó.
El mejor momento para que los fumadores dejen el hábito
El profesorJohn Newton, director de Mejora de la Salud en Public Health England, explicó:“A la luz de esta pandemia sin precedentes, nunca hubo un momento más importante para dejar de fumar. No solo por su propia salud sino también para proteger a quienes lo rodean”.
Asimismo, Newton señala que una vez que se abandona el vicio de fumar“hay beneficios para la salud muy reales”, ya que el cuerpo continúa reparándose durante el tiempo que permanezca libre de toxinas.