El mandatario defendió una serie de medidas de ajuste presupuestario del Estado con el objetivo de paliar «los estragos» generados por la pandemia.
El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, anunció hoy un recorte del gasto público de más de 4.000 millones de dólares, que incluirá reducciones salariales de los trabajadores públicos, que justificó por la grave situación financiera del país que, aseguró, se profundizó por la emergencia sanitaria y económica provocada por la pandemia de coronavirus.
En un discurso grabado a la Nación, el mandatario defendió una serie de medidas de ajuste presupuestario del Estado en que, de esa manera, se podrán paliar «los estragos» generados por la pandemia.
Las medidas incluyen la priorización de los gastos públicos garantizando la viabilidad de sectores como la salud, educación, seguridad y protección social, además de destinar financiación a la reactivación productiva del país y un ajuste de los precios de los combustibles.
Moreno aseguró que Ecuador dejará de recibir 8.000 millones de dólares a causa de la emergencia por coronavirus a escala mundial, cantidad que sumó al déficit de 4.000 millones del Presupuesto General del Estado (PGE).
En total, el país ha dejado de ingresar 12.000 millones, afirmó el mandatario antes de subrayar que la actual crisis provocó que 150.000 ecuatorianos perdieran su trabajo por el cierre de empresas.
Sumadas todas las guerras y desastres naturales que ha sufrido el país a lo largo de la historia, nunca llegaríamos a las pérdidas humanas y económicas que hoy vivimos”
«Sumadas todas las guerras y desastres naturales que ha sufrido el país a lo largo de la historia, nunca llegaríamos a las pérdidas humanas y económicas que hoy vivimos», recalcó.
Y en este contexto anunció la puesta en marcha del recorte del gasto público de más de 4.000 millones de dólares que corresponderá a una reducción de la masa salarial de 980 millones, bienes y servicios 400 millones y gasto de capital 1.300 millones.
También expuso que con la renegociación de la deuda se ahorrarán 1.300 millones en intereses.
En el ámbito de la Función Ejecutiva, la jornada laboral pasará de ocho a seis horas diarias con remuneración equivalente y prioridad al teletrabajo, excepto para funcionarios esenciales como de la Salud, Policía, Fuerzas Armadas y entidades de seguridad.
La jornada de los docentes se reducirá solo una hora, decisión que según Moreno, «permitirá no desvincular a ningún maestro».
El presidente ecuatoriano afirmó que, en línea con la política de austeridad propuesta desde el inicio de su Gobierno hace tres años, se han eliminado 43 entidades y se prevé la supresión o fusión de 10 más.
En esa línea, anunció la eliminación de siete empresas públicas, entre ellas la aerolínea TAME -con pérdidas de más de 400 millones en cinco años-, que entrará en liquidación, preservando las rutas que conectan lugares que no tienen alternativas privadas.
En el sector exterior resolvió cerrar algunas embajadas y oficinas diplomáticas, entre ellas la de Irán, Nicaragua y la Representación ante el Parlamento Andino, informó la agencia de noticias EFE.
En relación a las críticas recibidas por haber pagado deuda externa al inicio de la pandemia, el dirigente argumentó que se cancelaron 341 millones, lo que permitió un ahorro de 1.300 millones por intereses, gracias a los cuales se obtuvieron 1.400 millones de los organismos multilaterales en condiciones muy favorables.
Asimismo, Moreno justificó también la aprobación de la Ley de Apoyo Humanitario, además de la de Ordenamiento de las Finanzas Públicas, que en la práctica aplica una severa reforma laboral, señaló EFE.