Fabian Almonacid, delegado en la ciudad del Colegio de Corredores Inmobiliarios de Chubut, cuestionó la nueva ley de alquileres y planteó que “nadie sabe si va a perjudicar o beneficiar, ni al inquilino ni al propietario”, al tiempo que cuestionó la falta de consulta de los legisladores hacia los referentes de este sector. Sobre la crisis producto de la pandemia, dijo que no incide en los alquileres de viviendas, pero anticipó un fuerte impacto en los alquileres de locales comerciales, que “tenderán a bajar sus precios, como ya está pasando”.
“Como todas las modificaciones que se hicieron antes, nos adaptaremos al nuevo esquema –opinó el representante-. Pienso que los políticos redactan leyes que entienden poco y los beneficios son menores a los que todo el mundo cree. Me parece que es más una cuestión de imagen política. Nadie tiene claro si van a beneficiar o perjudicar a inquilinos o locadores, que son los propietarios”.
También hizo referencia al decreto que se sancionó al inicio de la pandemia, que en la práctica terminó por no aplicarse. “Ese decreto no suspendió los aumentos, sino que los prorrogaba. Muchos inquilinos decidieron evitar pagar todo el aumento a partir de octubre y optaron por pagar la actualización que correspondía. En algunos casos con bajas de salarios sí se aplicó, como en el caso de petroleros”, relató.
En realidad, se hacen grandes títulos de noticias que no benefician a nadie”, insistió el corredor. “Tendremos que adaptarnos, como hace cinco años cuando el nuevo Código Civil bajó todos los alquileres a dos años, hasta los comerciales y nadie sabía por qué. Ahora se vuelven a subir a 3 años, para comercios y viviendas, pero tampoco está claro el concepto”.
Para Almonacid, no hay dudas de que el nuevo sistema de actualización anual dará un resultado más costoso que el sistema anterior. “Antes la actualización semestral era del 15 por ciento y al año no superaba el 30 ó 35 por ciento; con este nuevo sistema, con una inflación del 50 por ciento anual, el aumento de alquileres va a ser mucho más alto. Ninguno de los dos, ni el inquilino ni el propietario, sabe de cuánto será el precio al segundo o el tercer año. Antes el inquilino se beneficiaba con un aumento por debajo de la inflación”.
Las viviendas no bajan precios, pero locales comerciales sí
Consultado en un plano más general sobre las consecuencias de la cuarentena, Almonacid detalló que el precio de los alquileres de vivienda no se han visto modificados, “porque en Comodoro Rivadavia la demanda no ha dejado de crecer desde el 2002 en adelante. Por cada casa que se desocupa tenemos cinco o seis personas esperando”, graficó.
Sin embargo, reconoció que el efecto se sentirá fuertemente sobre los locales comerciales. “Está a la vista la cantidad de locales comerciales desocupados y la demanda va a seguir planchada después de pasar la pandemia, porque nadie puede garantizar si quien vaya a alquiler un local va a poder estar abierto. Hoy nadie va a buscar un alquiler cuando no sabe si podrá trabajar o no”.
Como consecuencia de esto, reconoció, los precios de ese segmento podrían reflejar una baja. “Cuando se reactive, muchos locales van a seguir vacíos durante bastante tiempo, por lo cual los propietarios tendrán que bajar los precios, como ya lo están haciendo hoy, porque es mejor eso antes que tener el local vacío”.