Las autoridades colombianas dieron este jueves el primer paso para que se haga justicia en el caso de los policías que agredieron hasta la muerte a un hombre en Bogotá al ordenar la detención de los dos principales implicados y arrestar a uno de ellos, mientras que el paradero del otro se desconoce.
Los agentes están involucrados en la muerte de Javier Ordóñez, de 46 años, que la semana pasada desató violentas manifestaciones contra la brutalidad policial que se cobraron la vida de otras 13 personas, diez de ellas en Bogotá y tres en la vecina localidad de Soacha.