Los candidatos a la vicepresidencia de Estados Unidos, el republicano Mike Pence y la demócrata Kamala Harris debieron este miércoles tras la conmoción política por el contagio de Covid-19 del mandatario Donald Trump. En un debate desordenado, hubo fuertes cruces por la política sanitaria frente al coronavirus y la relación económica con China.
La enfermedad del presidente de 74 años -sumada a las inquietudes sobre el estado físico y la edad de su rival Joe Biden, que es tres años mayor- aumentó el interés por este encuentro televisado. El debate se desarrolló en Salt Lake City, Utah.
A menos de un mes de las elecciones del 3 de noviembre, el contagio del presidente vuelve a poner en lo alto de la agenda el tema de la pandemia. Ambos candidatos debaten protegidos por una mampara, y con una separación de casi cuatro metros.
La pandemia
«El pueblo estadounidense ha sido testigo del mayor fracaso de cualquier administración presidencial en la historia de nuestro país. Sabían en enero lo que iba a pasar y lo encubrieron y hoy todavía no tienen un plan y Joe Biden sí lo tiene. Pence sabía de la gravedad de esto», apuntó Harris, precisamente, al comenzar a debatir sobre la pandemia.
«Desde el primer día Trump ha puesto en primer lugar la salud de los estadounidenses, hizo todo lo que había que hacer como suspender los viajes de China. Vamos a tener la vacuna en tiempo récord», respondió Pence y acusó a Harris de que el plan de Biden sobre la pandemia es un «plagio» del de Donald Trump. Asimismo, acusó a Harris de «socavar» la confianza de los estadounidenses en una vacuna para covid-19
La moderadora del debate tuvo que reprender repetidas veces a Pence dado que el republicano no respetaba el tiempo pautado de cada intervención.
La economía, impuestos y China
Harris metió en la agenda del debate la declaración jurada de impuestos de las últimas décadas de Trump, documentos que el presidente se negó a hacer públicos. Se supo que Trump había pagado solo 750 dólares de impuestos en 2016 y 2017. La denuncia fue desmentida por Pence en el debate de este miércoles.
«Va a ser el primer Presidente en dejar la presidencia con menos empleos con el que llegó», había dicho Biden en el debate presidencial. Ahora Harris comparó la gestión económica de Trump con la época de la gran depresión estadounidense.
Así las cosas, Harris aseguró que el candidato de su partido a la Casa Blanca revocará la reforma fiscal impulsada por Trump si gana las elecciones de noviembre próximo.
Pence, por su parte, acusó a la aspirante demócrata a la vicepresidencia de querer subir los impuestos y auguró que se rendirán a China económicamente.
«Joe Biden y Kamala Harris quieren subir los impuestos, quieren enterrar nuestra economía bajo un Nuevo Pacto Verde de 2 billones, del que usted fue una de las principales copatrocinadoras en el Senado de EE.UU. Quieren abolir los combustibles fósiles y prohibir la fracturación hidráulica, que costaría cientos de miles de trabajos estadounidenses en la zona central, y Joe Biden quiere que la economía vuelva a rendirse a China», dijo Pence.
Pence, asimismo, acusó a Biden de ser «un animador para la china comunista». Ella le contestó: «Han perdido la guerra comercial con China».
El debate sobre el racismo y la policía
En un país que estuvo conmovido por el «Black Lives Matter» (Las vidas negras importan) tras el crimen de George Floyd, el tema racial fue uno de los tópicos del debate.
Harris adelantó que, de ganar las elecciones, van a reformar el sistema policial y acusó a Trump de ser racista por ejemplo frente a mexicanos y musulmanes. «Biden reconoce la belleza de nuestra diversidad», destacó la actual senadora.
«Esta presunción de que hay que hay un racismo sistémico en Estados Unidos es un insulto a los hombres y mujeres que son parte de la seguridad», contestó Pence.
Los candidatos
Kamala Harris, una exprocuradora de 55 años, conocida por hacer preguntas inquisidoras, tiene un adversario a quien culpar por la gestión de la pandemia, que ha dejado más de 210.000 muertos en Estados Unidos, el país del mundo con más fallecidos.
Pence, de 61 años, encabeza desde febrero la célula encargada de hacer frente a la pandemia y ahora tiene un brote en la misma Casa Blanca.
Trump está de regreso en la Casa Blanca desde el lunes tras estar tres días hospitalizado por el covid-19 y, según su médico, ya está sin síntomas y no tiene fiebre desde hace cuatro días. El mandatario juega la carta de un líder sin miedo e insta a los ciudadanos a no dejarse «dominar» por el virus.
El comportamiento de Trump – incluyendo el hecho de que salió a saludar a sus seguidores desde un coche cuando estaba hospitalizado y se sacó la mascarilla al regresar el lunes a la Casa Blanca- es especialmente criticado por los demócratas.
«Las mascarillas salvan vidas», tuiteó precisamente Harris. Trump le respondió acusando a la demócrata de estar «más a la izquierda que el loco Bernie», en referencia al precandidato demócrata, Bernie Sanders.
«Biden no va a durar un mes», afirmó Trump, que durante todo el día ha estado muy activo en su Twitter.
La interrupción por Trump de las negociaciones con la oposición demócrata sobre la asistencia económica a hogares y empresas perjudicadas por la pandemia seguramente será abordada en el debate.
La pandemia pulverizó el mercado laboral y atizó el desempleo, quitándole a Trump uno de los mejores argumentos a favor de su gestión: una tasa de paro que llegó a tocar un mínimo de 3,5%, pero que ahora está en 7,9%.
En contraste con la desaprensión de Trump hacia el virus, Biden respeta las medidas de protección, pero sus adversarios lo acusan de usar la pandemia para eludir a electores y periodistas.
Procurando mostrarse como el unificador de un país dividido, Biden lidera desde hace meses las encuestas. Y aumentó aún más su ventaja sobre Trump tras el caliente debate entre ambos el 29 de setiembre.
Después de aquel debate, Trump fue diagnosticado con Covid-19. Biden fue sometido desde entonces a cuatro pruebas, todas con resultado negativo.
El tema migratorio fue también usado por los demócratas contra Trump después de la publicación de un artículo del diario The New York Times sobre la implicación del fiscal general en la política de «tolerancia cero» a la inmigración que implicó la separación de miles de niños de sus padres en la frontera con México en 2018.
Cristiano ferviente, Pence, que es abogado, contrasta con la pletórica personalidad de Trump.
De padre jamaiquino y madre india tamil, Harris parece una promesa de vitalidad ante un Biden que, en caso de ganar, sería el presidente más viejo en llegar a la Casa Blanca.
Harris, que es la primera candidata negra a la vicepresidencia de uno de los grandes partidos, también sería la primera mujer en llegar al segundo cargo más importante de Estados Unidos, si ganara Biden.