El piloto francés Romain Grosjean (Haas) se encuentra «bien» y fuera de peligro tras sufrir un gravísimo accidente al inicio del Gran Premio de Bahréin, penúltima cita del Mundial de Fórmula 1, en el que su monoplaza se estrelló contra los guardarraíles, se partió en dos y quedó envuelto en llamas.
El trazado de Sakhir contuvo la respiración en el, quizás, accidente más grave de los últimos años en el ‘Gran Circo’, que milagrosamente se saldó sin desgracias. En la primera vuelta de carrera, el coche del piloto galo se tocó con el del ruso Daniil Kvyat (AlphaTauri) y se desvió de su trayectoria para irse directo a gran velocidad al guardarraíl.
En el impacto, el monoplaza quedó partido en dos mientras las ruedas saltaban por los aires, y una explosión alarmaba a todos en el circuito bahreiní.
Los larguísimos minutos de incertidumbre terminaron cuando las imágenes de televisión mostraban a Grosjean sano y salvo, y el silencio contenido se rompió con los aplausos de todos los presentes en boxes.
Incredibile in #BahrainGP! Dio mio! pic.twitter.com/GmHCrEpYu4
— Andrea Bricchi (@AndreaBricchi77) November 29, 2020
Grosjean consiguió salir entre las llamas después de 27 segundos gracias a un espacio vital entre el guardarraíl y el coche. «Esto fue espantoso. Romain está fuera del monoplaza y está bien», confirmó Haas.
Así, el francés, visiblemente «aturdido», fue trasladado en helicóptero al hospital para someterse a algunas pruebas, aunque aparentemente solo sufre «quemaduras en manos y tobillos».