Pilar Mazzetti, la ministra de Salud peruana que dirigió las labores de lucha contra el covid-19 durante la mayor parte de la pandemia, recibió en secreto vacunas de «cortesía» de Sinopharm mientras se evaluaba su idoneidad, una revelación que agrava aún más el ya dramático caso del «vacunagate» en el país.
Así lo reveló de forma solemne e indignada el presidente Francisco Sagasti, quien indicó que tanto Mazzetti, quien dimitió el viernes pasado, como la ex canciller Elizabeth Astete, quien también renunció este sábado, figuran en la lista de las 487 personas que fueron inoculadas con la solución del laboratorio chino, en secreto, y bajo criterios de selección aparentemente arbitrarios.
EFE