El Intendente de Trevelin, Hector Ingram dejó formalmente habilitado el período ordinario de sesiones en el Concejo Deliberante. Un amplio recorrido por lo hecho en el 2020 con el particular momento que toca transitar, lo que queda por hacer, proyectos y la ratificación de la postura del NO A LA MINA, fue parte de lo desarrollado.
El proceso de abordaje de la pandemia dio inicio a su discurso donde destacó fundamentalmente los cambios obligados que debieron aplicarse en la comunidad para preservarla de una nuevo estado sanitario que sorprendía al mundo.
Los efectos de ese proceso fueron marcados por Ingram “El mundo es otro desde diciembre de 2019. Aquí, en Trevelin, comenzamos a sentir las consecuencias desde el mes de marzo de 2020. Como gobierno, nos puso en situación de tener que tomar decisiones que fueron difíciles de asimilar. Fue necesario suspender actividades, encuentros sociales, eventos culturales y deportivos y hasta las reuniones familiares. Nos impuso dejar de lado algunas políticas que teníamos decidido llevar adelante e implementar otras. Los recursos que eran pocos, fueron aún menores”.
De todas maneras, a pesar de la descripción de un escenario complejo también estuvo presente el momento de los agradecimientos “Considero necesario también reconocer a los y las trabajadores estatales de los tres niveles, que, como servidores públicos, han estado a la altura de las circunstancias» indicó y mencionó en este sentido a los trabajadores de salud, a los municipales y al sector comercial y empresarial.
El desafío de estos tiempos de los gobiernos, con una coyuntura tan demandante es también la constancia en las gestiones para concretar proyectos a mediano plazo. El discurso recorrió temáticas variadas de incumbencia local, la gestión de recursos, el abordaje local de los temas de género, el trabajo general y necesariamente contenedor de desarrollo social, cultura, turismo y deportes y también la cuestión económica.
Desendeudamiento y pagos pendientes
En relación con este aspecto el mandatario municipal de Trevelin señaló: “Una de las primeros objetivos que nos propusimos fue el de sacar a la Municipalidad del ahogo en el que se encontraba por un endeudamiento que nos impedía avanzar. De la deuda del año 2019, sólo resta pagar a dos proveedores por una suma superior a los 400 mil pesos. A ello se le suma a la fecha, deudas contraídas en el 2020, por alrededor de 700 mil pesos.
Se pudo terminar de abonar el convenio de pago con la Cooperativa 16 de Octubre; se honró la deuda con la Municipalidad de Esquel por el depósito de basura en la planta GIRSU.
Sobre ésta última deuda, vale señalar que se mantienen reuniones entre los secretarios de Hacienda y Ambiente de ambos municipios para alcanzar un convenio que sea beneficioso para ambos, dado que el Municipio de Trevelin, además de abonar sueldos de personal que se desempeñan en la Planta y compartir gastos que esa planta genera, tiene que pagar desde el año 2017 por cada tonelada de basura que envía.
El desendeudamiento se logró gracias a una administración eficiente de los fondos públicos que, a pesar de la caída de los ingresos municipales, ya sea por regalías; coparticipación de impuestos o ingresos propios, ha podido responder también a la demanda de recursos para el normal funcionamiento de la estructura municipal.”