Tiene el tamaño de una sarihuella, bautizado con el nombre de Orretherium tzen, cuyos restos fueron localizados en rocas de la Era Mesozoica, también conocida como la «Era de los Dinosaurios».
Científicos de Argentina, Brasil y Chile descubrieron e identificaron un nuevo mamífero que habitó la región del Estrecho de Magallanes y el sur del país trasandino hace 74 millones de año, según publicó la prestigiosa revista Scientific Reports, del grupo Nature.
Los restos hallados consisten en una mandíbula con 5 dientes y un diente molar del maxilar, de pequeño tamaño, descubiertos en rocas de la Formación Dorotea (Cuenca Magallanes), con una antigüedad aproximada de entre 74 a 72 millones de años.
El origen del nombre tiene dos raíces: Orre significa «dientes» en Aonikenk, y therium significa «bestia» en griego, una terminación frecuentemente usada en géneros de mamíferos. Por otro lado, la especie tzen significa «cinco» en Aonikenk, en referencia a tener preservados 5 dientes consecutivos en la mandíbula.
El descubrimiento de Orretherium es de suma importancia porque la mandíbula preservada, de menos de 3 cm largo, posee los cinco dientes en posición, permitiendo conocer la variación de la morfología dental en esta especie, y por lo tanto ser una herramienta para ayudar a clasificar dientes que se encuentran aislados, con una posición en la mandíbula o maxilar a veces tentativa.
«Durante fines de la Era Mesozoica los ecosistemas terrestres eran notoriamente diferentes a los actuales y los fósiles que se encuentran en rocas Cretácicas de la región de Magallanes están develando una historia fascinante justo en el momento anterior a la gran extinción de los grandes dinosaurios y otros reptiles», indicó una publicación de la Fundación Azara.
Jonatan Kaluza, Técnico del Conicet con lugar de trabajo en la Fundación Azara-Universidad Maimónides, resaltó que los fósiles de animales pequeños «nos ayudan a entender y construir una fracción de la biota, aportando importantes conocimientos sobre la ecología y distribución de las especies».
«Si bien la búsqueda de fósiles es realizada a través de una simple prospección superficial de los sedimentos expuestos, hallar y rescatar fósiles de pequeños animales comprende una estrategia muy distinta a las utilizadas en animales de mayor tamaño», indicó el especialista.
Por su parte, el paleontólogo Agustín G. Martinelli destacó que «contar con un material tan bien preservado de un mamífero del Período Cretácico es un privilegio y es fundamental para conocer mejor no solo a esta nueva especia mesozoica sino también extrapolar su información para otros mamíferos encontrados en Argentina».