El intendente Gustavo Sastre se refirió ayer acerca de la polémica suscitada por los reclamos de Adrián Maderna en la reunión con el presidente Fernández y el gabinete nacional. Señaló que “seguramente analizó muy bien la manera de hacer el reclamo”, pero también advirtió que “los enojos de alguna de las partes no pueden poner en riesgo ni la gobernabilidad ni mucho menos el bienestar de los vecinos”.
El intendente de Trelew aprovechó el encuentro en Comodoro para reclamarles obras e inversión a los ministros, en particular al de Desarrollo Productivo Matías Kulfas. Se quejó por la falta de respuesta en la presentación de un proyecto para balizar el aeropuerto y expresó: «Nos cansamos de pedir y no llega». También les reprochó la falta de participación en las elecciones locales y advirtió que viven un «momento delicado» que «no sabemos hasta cuándo lo vamos a poder sostener».
Consultado al respecto al aire de FM EL CHUBUT, Gustavo Sastre contó que mantuvo una charla con Maderna el martes por la noche, luego de la visita del presidente.
“Cada uno es dueño de sus actos y de intentar llevar adelante a su manera los reclamos. Si es lo que el intendente sintió en ese momento, él sabrá por qué lo hace y seguramente habrá analizado muy bien que era la mejor manera de hacerlo”, subrayó.
A su vez, el Jefe Comunal remarcó que “de nuestras decisiones depende el bienestar de los vecinos” y que “debemos manejarnos con la madurez necesaria: Sentarse y hablar las cuestiones porque acá los enojos de alguna de las partes no pueden poner en riesgo ni la gobernabilidad ni mucho menos el bienestar de los vecinos”.