El crudo que se toma como referencia en Argentina se negoció este lunes apenas por encima de los 84 dólares y las entregas para noviembre se llegaron a pactar en la banda de los 82.Son los valores más bajos desde inicios de año, ya que para encontrar esa cotización hay que remontarse hasta las jornadas del 12 y 14 de enero de este año.
Aunque los 84 dólares en que cotiza este lunes el crudo tipo Brent, que se toma como referencia en la Argentina, sigue ubicándose en un nivel más que aceptable, la tendencia a la baja en las últimas semanas podría anticipar una nueva etapa, luego de haberse ubicado en torno a los 100 dólares durante gran parte del año, e incluso por encima de esos valores.
Según coinciden los reportes internacionales, la baja en la cotización del petróleo, que se aceleró la semana pasada, responde a los temores en torno a un nuevo enfrentamiento de la economía global, tras la reciente suba de la tasa de interés en Estados Unidos y otros países centrales, como política para combatir la inflación.
Es probable que la próxima reunión de la OPEP y aliados, entre los que se cuenta Rusia, acuerden un nuevo recorte de producción en su próxima reunión prevista para el 5 de octubre, en línea con lo realizado en la reunión anterior. En esa oportunidad, ante las señales que ya se venían verificando de un mercado a la baja, aunque el recorte anunciado fue simbólico, de sólo 100.000 barriles diarios (alrededor del 0,5% de la producción mundial).
En esa oportunidad también se advirtió otro factor de tensión, ya que los países nucleados en el G7 habían anticipado posibles sanciones contra el petróleo de Rusia, en el marco del conflicto con Ucrania. Paralelamente, Arabia Saudita había asumido compromisos con Estados Unidos para comenzar a incrementar lentamente la producción, a fin de atenuar los precios que explican gran parte del alza inflacionaria.
EL evento parece una muestra más de la alta volatilidad del mercado. Hasta mitad de este año se preveía que la demanda mundial superaría los 100 millones de barriles diarios durante el año próximo, a partir del recupero de la economía tras la pandemia, de allí que la OPEP había iniciado un sendero de incremento de producción desde agosto, lo que empezó a revisarse apenas se inició septiembre.