La Cámara Federal de Casación Penal concluirá esta semana con las audiencias en las que revisa si confirma o revoca las condenas y las absoluciones en el caso de las irregularidades en las 51 obras públicas para la provincia de Santa Cruz que recibió el empresario Lázaro Báez en la que la ex presidenta Cristina Kirchner recibió una pena de seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. Y el tribunal tiene que resolver si convoca a declarar nuevamente a la ex mandataria y al resto de los imputados.
Es para lo que se conoce como una audiencia de visu para tomar contacto directo con los acusados y conocer sus condiciones personales. No es para que los imputados vuelvan a declarar sobre los hechos, aunque el espacio es abierto y ese escenario se podría dar. La decisión la tienen que tomar los jueces de la Sala IV de Casación, Gustavo Hornos, Mariano Borinsky y Diego Barroetaveña, que están a cargo del proceso.
A fines de febrero, Casación comenzó a revisar el fallo que en diciembre del 2022 dictó el Tribunal Oral Federal 2 de Comodoro Py. Lo hizo en audiencias públicas que terminarán este jueves con la exposición de las últimas defensas. El Tribunal Oral condenó a Cristina Kirchner, a Báez, al ex titular de la Dirección de Vialidad Nacional Nelson Periotti, al ex secretario de Obras Públicas José López y cinco ex funcionarios de Santa Cruz a penas de entre seis y tres años de prisión por el delito de administración fraudulenta. Y fueron absueltos el ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido, los ex funcionarios de esa cartera Abel Fatala y Carlos Santiago Kirchner -primo del ex presidente Néstor Kirchner- y el ex funcionario de Santa Cruz Héctor Garro.
El fallo fue apelado por las partes para que sea revisado por Casación. El fiscal Mario Villar, en la primera audiencia, pidió que en el caso también se aplique el delito de asociación ilícita, que se eleven las penas y que se revoquen los sobreseimientos. Así, solicitó 12 años de prisión para Cristina Kirchner, Báez, López y 10 años para Periotti y De Vido.
“Entre 2003 y 2015 funcionó en el estado una asociación ilícita que desvió los fondos de las obras públicas viales a Lázaro Báez. Hubo una verdadera asociación criminal. No fue el Estado el que cometió delitos, fueron personas que eran funcionarios”, planteó Villar en la audiencia.
Luego fue el turno de las defensas que hicieron sus objeciones sobre la acusación y reclamaron las absoluciones. “El fallo del tribunal oral fue un acto de arbitrariedad monumental. No tiene pruebas directas, la sentencia se funda en base a prueba indirecta o indicios. Ningún testigo dijo en el juicio que Cristina Kirchner dio instrucciones para beneficiar a Lázaro Báez”, planteó Alberto Beraldi, abogado de la ex mandataria.
La última audiencia será este jueves a las 10 horas cuando expongan las defensas de De Vido, Fatala, Garro y Carlos Kirchner. Luego de eso la Cámara de Casación deberá tomar algunas decisiones. Que también podrían darse antes de la audiencia.
Una es anunciar que las partes tendrán un plazo para presentar lo que se conoce como breves notas para que por escrito puedan responder lo que se dijo en las audiencias. Casación también deberá resolver un pedido de la defensa de Cristina Kirchner: que Rodolfo Barra, procurador del Tesoro del gobierno de Javier Milei, sea citado a declarar como testigo.
Es porque en septiembre del año pasado, Barra -a pedido de Cristina Kirchner- hizo un dictamen como experto legal en el que concluyó que la ex presidenta no cometió ninguna irregularidad en su actuación administrativa de la obra pública para Santa Cruz. La defensa solicitó que Barra declare para ampliar sus fundamentos. El fiscal Villar se opuso porque la ley no permite incorporar prueba nueva en esta etapa, porque Barra no fue testigo de los hechos y porque su dictamen no fue como perito, sino como asesor de una parte.
El punto central que deberán resolver los jueces es si Cristina Kirchner y el resto de los acusados son citados a las audiencias por el impacto político que significaría el regreso de la ex presidenta a los tribunales de Comodoro Py. El Código Penal de la Nación establece en su artículo 41 que ante el dictado de un fallo que puede condenar o aplicar penas “el juez deberá tomar conocimiento directo y de visu del sujeto, de la víctima y de las circunstancias del hecho en la medida requerida para cada caso”. Se conoce como audiencia de visu que en latín significa visto directamente.
Se trata de audiencias personales en la que los magistrados conocen al acusado y le preguntan por sus condiciones de vida, trabajo, salud, familiar, si tiene otras causas penales. La misma Sala IV de Casación hizo esas audiencias en la causa de lavado de dinero contra Báez.
En el caso de la obra pública ya se realizó una primera audiencia de visu. Fue la semana pasada cuando las defensas de Báez y Periotti pidieron sus absoluciones. Periotti estuvo presente en el tribunal y su abogado, Federico Paruolo, le solicitó a Casación que por esa situación ya le tome la audiencia personal, lo que el tribunal aceptó. Allí Periotti criticó la causa, habló de su vida profesional, de su familia, de su estado de salud y de que en otra causa estuvo detenido en 2019 poco menos de un mes.
Ahora la expectativa es si Casación convoca a la misma audiencia a Cristina Kirchner y el resto de los acusados. Si eso ocurre puede ser de distintas modalidades. Tanto presencial en los tribunales de Comodoro Py o por videoconferencia, un sistema que se utiliza mucho desde la pandemia. A su condena por la obra pública en Santa Cruz, Cristina Kirchner la escuchó de esa manera.
También se deberá decidir si la audiencia es privada o pública. En el caso de Periotti, el juez Hornos le preguntó si era con el público presente en la sala y por el canal de Youtube del Poder Judicial y el ex funcionario contestó que no tenía inconvenientes. Pero la decisión será de cada acusado, aunque como principio general rige la publicidad de la audiencia.
Fuente: Infobae