En una ceremonia que fue encabezada por la presidenta del Tribunal Superior de Justicia, Silvia Bustos; y por el intendente Damián Biss, quedó inaugurado ayer el Juzgado de Familia de Rawson en Belgrano 521. El acto contó también con la presencia del Procurador General, Jorge Miquelarena y el presidente del Concejo Deliberante, Dulio Monti.
El lugar, donde también funcionan las dependencias de los Equipos Técnicos Interdisciplinarios, se caracteriza por su arquitectura sostenible y eficiencia energética. Se trata de un espacio innovador y respetuoso con el medio ambiente, construido sobre una estructura ya existente.
Las instalaciones fueron proyectadas y diseñadas siguiendo estándares de arquitectura inclusiva y se caracterizan por su arquitectura sostenible, eficiencia energética y uso de materiales de poco mantenimiento, con el compromiso de la inclusión y accesibilidad para todos.
Bustos sostuvo que es necesario «dar una nueva mirada al abordaje de todas las problemáticas que tenemos nosotros, en una etapa tan compleja como la que estamos atravesando» y agregó que «en esto de la innovación pensamos en trabajar con todos los poderes del Estado con una misma finalidad en la Justicia de Familia, en el abordaje de temas muy sensibles, con problemáticas muy diversas y que requieren este trabajo articulado».
«Rawson tiene una característica y es que trabaja de manera articulada con el poder Judicial, el Poder Ejecutivo, el Concejo Deliberante, la Asesoría de Familia, que hacen una gran labor y que articulan y diseñan las estrategias de abordaje en cada una de las problemáticas para poder dar una respuesta real», comentó.
«Esto tiene que ver con pensar en un abordaje, hacer un diseño de estrategia, pero poder llevarla adelante, porque si no generamos escudos de papel que son imposibles de realizar. Creo que en esa medida y en ese camino es en el que vamos a encontrar las mejores respuestas para una justicia que dé un resultado y una solución real a la conflictividad que tenemos» sostuvo Bustos.
En cuanto al diseño, se trata de un edificio en el cual no existen barreras físicas para transitar desde la calle hasta cualquier sector de su interior; y, por otra parte, se le dio especial importancia al ahorro energético con un sistema de perfilería de aluminio y vidrio doble que evita las pérdidas de calor o frío. El diseño bioclimático permite maximizar la ventilación natural y reducir el uso de aire acondicionado.
Toda la iluminación es LED y en los exteriores funciona mediante foto células para el ahorro energético y para una segunda etapa se proyecta la instalación de paneles solares que cubrirán alrededor de un 30% de la demanda energética del edificio.
Sobre la fachada se trabajó con parasoles de aluminio para darle seguridad e intimidad al interior del Juzgado, lo que permitió concretar un espacio cómodo y saludable para los usuarios.