Alimentos aumentaron durante noviembre, según datos de consultoras privadas. Este incremento fue impulsado por el alza del 12% en el precio de la carne durante los últimos días del mes. La inflación mensual total se proyecta en un 3%, generando preocupación por el impacto en el costo de vida.
Este aumento complica los objetivos económicos del gobierno, que requiere mantener la inflación en torno al 2,5% durante dos meses consecutivos para levantar el cepo cambiario. Productos esenciales como la carne representan un desafío para estabilizar los precios en el corto plazo.
El presidente Javier Milei vinculó la reducción del crawling peg al 1% y el levantamiento de restricciones cambiarias al control de la inflación. Sin embargo, las presiones en los precios de alimentos podrían retrasar estas medidas clave.
Alimentos aumentaron entre 2,3% y 2,8% según LCG y Eco Go
De acuerdo con la consultora LCG, los alimentos aumentaron entre 2,3% y 2,8%, registrando un alza marginal del 0,1% en la última semana del mes. Este dato refleja una desaceleración frente al incremento del 1,5% observado en la semana previa.
Entre los productos con mayores aumentos destacan la carne (+2,8%), aceites (+0,9%) y panificados (+0,3%). Estos alimentos básicos son responsables de la presión inflacionaria que afecta directamente a los hogares.
Por otro lado, Eco Go reportó un aumento del 0,5% en la cuarta semana de noviembre. Proyectando un incremento del 0,7% para la última semana, estimaron que los alimentos cerrarían el mes con un aumento total del 2,8%.
El reciente ajuste en los precios de la carne no se ha reflejado completamente en los índices de noviembre. Esto podría generar un impacto adicional en la inflación general durante diciembre.
Proyección de la inflación en noviembre
Las consultoras privadas estiman que la inflación mensual general alcanzará el 3%, impulsada por los aumentos en alimentos. Aunque moderada frente a meses anteriores, esta cifra representa un desafío para las políticas económicas actuales.
El alza en productos clave como la carne evidencia la necesidad de implementar medidas efectivas para contener la inflación. De no hacerlo, el costo de vida seguirá subiendo, afectando el poder adquisitivo de los hogares.