Salta respaldó cerco olímpico
La decisión conjunta y en el marco del Plan Güemes, para construir un alambrado perimetral en Aguas Blancas, está tomada. Serán 200 metros entre la terminal de ómnibus y la oficina de Migraciones en esa ciudad fronteriza con los objetivos de reforzar los controles, la prevención de actos ilícitos y regulación migratoria.
El gobernador de Salta Gustavo Sáenz afirmó “que hay una política de los Estados nacional y provincial para pelear contra el narcotráfico y combatir el contrabando y otros delitos complejos” en una zona fronteriza crítica que al ser un punto limítrofe con alto flujo de personas y bienes, presenta múltiples desafíos.
Por ello aseveró que “Es la primera vez en la historia que se está trabajando seriamente y en conjunto para combatir el narcotráfico”.
De acuerdo con Puntal, Gustavo Sáenz además señaló que el alambrado optimizará la supervisión del flujo de personas y bienes, facilitando la identificación temprana de actividades irregulares. “Se busca encauzar la llegada y salida por la frontera; es decir que los que llegan a la terminal de Aguas Blancas sigan hasta Migraciones y saber con qué egresan y con qué llegan desde Bolivia”, dijo.
Así consideró que las objeciones efectuadas por el Estado Plurinacional de Bolivia no son procedentes en tanto el alambrado se construirá en el ejido municipal de Aguas Blancas. “Sobre el tema no tenemos que dar explicaciones. Creo que llevó la cuestión más allá. Son 740 km de frontera y este alambrado son 2 cuadras y media y dentro de nuestra casa”, puntualizó.
En esta línea recordó que también Bolivia expresó objeciones cuando la provincia de Salta comenzó a cobrar el servicio de salud pública a los extranjeros. “Fue una medida de justicia y de optimización de los recursos”, aclaró.