Golpe de Estado en Ecuador
La vicepresidenta electa de Ecuador, Verónica Abad, alertó este jueves de que «en pocas horas» se consumará un «golpe de Estado«, presuntamente planificado por el gobernante, Daniel Noboa, quien se apresta a delegar, por tres días, el cargo, a la vicepresidenta designada Cynthia Gellibert, mientras hace campaña electoral.
«En pocas horas se consumará el golpe de Estado planificado y anunciado por el presidente Daniel Noboa y su gabinete», dijo en una rueda de prensa Abad, que reclama para sí la delegación de las funciones presidenciales mientras Noboa hace campaña para las elecciones generales de febrero próximo, en las que busca el apoyo ciudadano para gobernar hasta 2029.
Según publicó Diario Libre, insistió en que ella ha sido víctima de una «brutal persecución, que tiene un solo objetivo: tomar por la fuerza el poder«, y recordó que el pasado sábado, a través de un vídeo difundido en redes sociales, anunció que al día siguiente asumiría la Presidencia cuando, al comenzar la campaña electoral, suponía que Noboa pediría licencia, pero eso finalmente no sucedió.
En ese video, Abad pedía el respaldo de las varias instituciones del Estado, entre ellos los militares, quienes respondieron no ser deliberantes y que les corresponde acatar lo que señale Noboa, una línea que repitió la Policía.
«El país conoce que las lealtades ya no están hacia nosotros, el pueblo y su Constitución, sino que, al parecer, ahora son leales a una persona», dijo Abad en la rueda de prensa.
Agregó que Noboa «ha decidido por su cuenta no pedir licencia» y «en lugar de atender a la ley ha decidido nombrar como presidenta de la República» a Cynthia Gellibert, a quien el Noboa designó el sábado pasado como vicepresidenta, al considerar que Abad estaba ausente del cargo por no haber ido a Ankara, como consejera temporal, hasta el 27 de diciembre pasado como lo dispuso en un decreto.
«Claramente esto le traerá consecuencias no solo políticas, sino legales, nacionales e internacionales», aseveró Abad quien tildó de «mentiras» las suposiciones del oficialismo de que ella iba a propiciar un golpe de Estado.