A un día de conmemorarse el Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia, el gobierno nacional ordenó el derribo del monumento en homenaje al historiador y periodista Osvaldo Bayer, ubicado en el ingreso norte de Río Gallegos, Santa Cruz. La estructura, inaugurada el 24 de marzo de 2023, recordaba su obra «La Patagonia Rebelde», que documenta la represión policial y el fusilamiento de peones rurales en la década de 1920.
El operativo fue llevado adelante por personal de Vialidad Nacional, que justificó la medida argumentando que la estructura «entorpecía la visual y complicaba el drenaje del agua». Sin embargo, no se prevé su reubicación en otro sitio. La decisión se enmarca en la política de «memoria completa» impulsada por el gobierno actual, señala Canal12.
El escultor de la obra, Jerónimo Villalba, repudió la acción mediante una carta dirigida a Paulo Croppi, presidente del Distrito 23 de Vialidad Nacional. En la misiva expresó: “Hago un repudio total a las acciones violentas por parte del actual gobierno nacional”.
Un homenaje derrumbado
El monumento a Osvaldo Bayer se encontraba en el Paseo de la Memoria, dentro de los jardines del Complejo Cultural de Río Gallegos. Estaba acompañado por una inscripción que decía: “Bienvenidx, usted está ingresando a la tierra de la Patagonia Rebelde”, junto con el nombre del historiador y sus fechas de nacimiento y fallecimiento.
Desde el gobierno de Santa Cruz aseguraron desconocer la decisión de Vialidad Nacional y no haber sido notificados sobre su remoción. Actualmente, en el lugar solo quedan restos de la estructura.
Osvaldo Bayer y «La Patagonia Rebelde»
Osvaldo Bayer nació en Santa Fe en 1927 y es reconocido por su incansable labor en la recuperación de la memoria histórica. Su obra más emblemática, «La Patagonia Rebelde», narra los hechos ocurridos entre 1921 y 1922, cuando el Ejército Argentino fusiló a cientos de trabajadores rurales en Santa Cruz durante una huelga por mejores condiciones laborales.
La historia fue llevada al cine en 1974 bajo la dirección de Héctor Olivera y protagonizada por Héctor Alterio. Pese a estrenarse durante el último gobierno de Juan Domingo Perón, la película fue prohibida durante la dictadura de María Estela Martínez de Perón y Bayer fue perseguido por la Alianza Anticomunista Argentina (Triple A). En 1975, se exilió en Alemania, donde permaneció hasta el regreso de la democracia en 1983.
Su legado continúa vigente como símbolo de lucha por los derechos humanos y la reivindicación de los trabajadores. La decisión de derribar su monumento generó un fuerte rechazo en sectores culturales y de derechos humanos, quienes consideran el hecho como un retroceso en las políticas de memoria histórica.