Fruta es mejor que la naranja. Este alimento no solo ayuda a la digestión, sino que también es un gran aliado en la prevención de infecciones y en el fortalecimiento del sistema inmunológico.
Si bien el consumo de frutas es clave para una alimentación equilibrada, es importante conocer que no todas aportan los mismos beneficios a nuestro organismo. Por ejemplo, la naranja suele ser protagonista cuando se habla de vitamina C y fibra, pero el kiwi es una opción que la supera ampliamente, según publicó Canal 26.
Es que este alimento no solo ayuda a la digestión, sino que también es un gran aliado en la prevención de infecciones y en el fortalecimiento del sistema inmunológico.
Por qué el kiwi es mejor que la naranja
Refuerza el sistema inmunológico
El kiwi es una de las frutas con mayor contenido de vitamina C, la cual es fundamental para fortalecer las defensas y reducir el impacto de infecciones respiratorias. Es por ello que diversos estudios demostraron que su consumo frecuente no solo disminuye la probabilidad de enfermarse, sino que también puede acortar la duración de resfriados y otras afecciones.
Por otro lado, su alto poder antioxidante ayuda a combatir la inflamación pulmonar y retrasa el envejecimiento celular, característica que beneficia especialmente a personas mayores.
De esta manera, expertos recomiendan incorporar uno o dos kiwis al día a la dieta para así contribuir a mantener una mejor salud.
Su aporte a la digestión
La variedad verde de esta fruta es particularmente rica en fibra soluble e insoluble, favoreciendo el tránsito intestinal de manera natural.
Además, posee actinidina, enzima que facilita la digestión de proteínas y mejora la salud del aparato digestivo.
Tiene más vitamina C que la naranja
El kiwi supera ampliamente a la naranja en cuanto a vitamina C. Un solo fruto puede cubrir hasta el 85% de la ingesta diaria recomendada de esta vitamina clave para la formación de colágeno, la cicatrización de heridas y la absorción de hierro.
En tanto, su consumo frecuente puede contribuir a mejorar el estado anímico, ya que los niveles bajos de vitamina C se relacionan con síntomas de ansiedad y depresión.