El Eternauta. El Eternauta, la serie argentina basada en el mítico cómic de Oesterheld y Solano López, alcanzó el primer puesto del ranking global de Netflix para TV no inglesa. Con Ricardo Darín al frente, la historia de resistencia contra una invasión alienígena conquistó el mundo, sumando más de 58 millones de horas vistas en su primera semana.
El Eternauta, la flamante adaptación del legendario cómic creado en 1957 por Héctor Germán Oesterheld y Francisco Solano López, no solo emocionó al público argentino: se convirtió en la serie más vista del mundo en Netflix dentro de la categoría de TV no inglesa, superando a pesos pesados de Corea, Alemania y Turquía. En su primera semana al aire, el mundo le dedicó 58,3 millones de horas de visualización, con 10,8 millones de reproducciones, una cifra que confirma que la épica argentina cruzó todas las fronteras.
La historia se sitúa en una Buenos Aires actual devastada por una nevada mortal que forma parte de una invasión alienígena silenciosa y despiadada. Allí aparece Juan Salvo, interpretado magistralmente por Ricardo Darín, un hombre común que se convierte en símbolo de resistencia. La serie recupera con fuerza el mensaje de unidad, coraje colectivo y sobrevivencia desde lo más argentino: la improvisación, el ingenio y la garra.
«Esto es sobre lo que nos salva: el otro, el grupo, el vínculo», dijo Darín. Por su parte, el director Bruno Stagnaro expresó: «Mantener el espíritu del original era una cuestión de respeto y militancia cultural».
Además de la fidelidad al relato original, se destaca la actualización del contexto, con menciones sutiles a problemáticas contemporáneas como el colapso climático, la desigualdad social y la violencia institucional, lo que le da otra capa de profundidad a una historia que ya era potente de por sí.
La serie no solamente emociona por su contenido, sino que marca un antes y un después en la producción audiovisual argentina. Con un equipo técnico mayoritariamente nacional y la utilización de tecnología de punta como el virtual production, se logró recrear una Buenos Aires postapocalíptica con nivel hollywoodense, sin perder su identidad urbana, con locaciones reconocibles y guiños al paisaje porteño.
Los efectos especiales, supervisados por un equipo mixto de artistas digitales argentinos e internacionales, impulsaron la ambientación al siguiente nivel, permitiendo que el terror y la desolación de la nevada tóxica se sintieran en la piel. A eso se suma una banda sonora original compuesta por Federico Jusid, que potencia el tono melancólico y heroico de la serie con una sensibilidad muy nuestra.
Además de Darín, el elenco brilla con actuaciones sólidas de César Troncoso, Andrea Pietra y Carla Peterson, y una camada de jóvenes talentos que sorprenden. Se destacan también las modificaciones del guion, como el protagonismo renovado de los personajes femeninos y el vínculo entre Salvo y su hija, que aportan nuevas capas emocionales a la historia.
Frente a este fenómeno, era esperable: Netflix ya confirmó una segunda temporada, que según adelantaron los creadores, irá más allá del cómic y expandirá el universo de la resistencia con nuevos personajes y conflictos. Sin dudas, El Eternauta es más que un golazo nacional: es una prueba de que la cultura argentina puede romperla fuerte cuando se la banca con talento, identidad y visión.