En Ciudad de Gaza y el norte de la Franja, miles de personas se niegan a abandonar sus hogares ante la ofensiva militar israelí, aunque los servicios básicos desaparecen.
Más de 900.000 palestinos permanecen en la Ciudad de Gaza y en el norte de la Franja de Gaza, resistiendo un desplazamiento forzoso promovido por el operativo militar de Israel. A pesar de las órdenes de traslado hacia el sur, miles regresan al norte por la falta de agua, alimento, refugio seguro y atención médica.
Según informó Radio 3 Cadena Patagonia, la Oficina de Medios del Gobierno de Gaza reportó que unas 22.000 personas ya volvieron de zonas presentadas como “humanitarias”, pero también golpeadas por bombardeos.
Bombardeos masivos y zonas “humanitarias” atacadas
Las operaciones militares se concentran en áreas como Al-Mawasi en Khan Younis y Rafah, con más de 110 ataques, que dejan más de 2.000 muertos, sin contar aquellos cuyos cuerpos permanecen bajo los escombros. Israel ha destinado apenas el 12 % de Gaza a zonas de refugio, intentando concentrar allí a más de 1,7 millones de desplazados, en espacios superpoblados e insuficientes para las necesidades básicas.
Crisis humanitaria agudizada al sur y retornos forzados
Las condiciones de vida en las zonas hacia donde se pide trasladarse son extremadamente precarias. La falta de agua potable, alimentos, atención médica y refugios seguros hacen que muchas familias prefieran regresar al norte, pese al peligro. La Oficina de Medio del Gobierno de Gaza indicó que estas zonas promocionadas como “humanitarias” también han sido atacadas.
Impacto económico y daños civiles
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA) advirtió que cada familia enfrenta costos de casi USD 3.180 para huir con transporte, carpa y terreno, agravados por la escasez de combustible y la prohibición de ingreso de suministros esenciales.
Mientras tanto, Hamás denunció el uso de carros bomba y explosivos en barrios residenciales, calificando estos actos como crímenes de guerra y limpieza étnica. Solo en la última semana se documentaron unas 120 detonaciones de vehículos cargados con cientos de toneladas de explosivos.
Llamado urgente a la comunidad internacional
Pese al desplazamiento forzoso, la destrucción y los bombardeos, la población gazatí sigue resistiendo para mantener sus barrios originales. Organismos internacionales y el gobierno local hacen un llamado urgente a la comunidad internacional para que provea ayuda humanitaria inmediata y que se respete el derecho a permanecer en sus hogares, con dignidad y seguridad.
La resistencia de más de 900.000 palestinos frente al desplazamiento forzoso evidencia la gravedad de la crisis humanitaria en Gaza. Cuando las zonas de refugio también son golpeadas y los precios de los traslados son inalcanzables, el derecho a quedarse se convierte en un acto de supervivencia.