Para el politólogo Luis Costa, el escenario político vuelve a polarizarse entre peronismo y antiperonismo, dejando poco espacio para alternativas.
Según el análisis del politólogo Luis Costa, tras las últimas elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires se observa un reordenamiento político nacional donde el bipartidismo peronismo vs. antiperonismo vuelve a dominar, lo que hace que la consolidación de una tercera vía dependa de un descontento ciudadano profundo y extendido.
La fuerte recuperación del bipolarismo
Costa sostuvo que los resultados bonaerenses no son un caso aislado, sino parte de un fenómeno de reagrupamiento político que se replica en varias provincias. El esquema que emergió es claro: peronismo contra antiperonismo. En ese marco, una tercera fuerza con peso nacional enfrenta grandes obstáculos.
Para que una tercera alternativa política crezca, explicó Costa, no basta con el rechazo hacia el otro polo; es imprescindible también el descontento con el propio. Este doble rechazo aún no se ha consolidado entre los votantes.
Milei ya no es tercera vía
Un punto central de Costa es que la figura de Javier Milei dejó de ser una alternativa externa al bipartidismo: actualmente forma parte del clivaje antiperonista. Por eso, dice el analista, lo que se prevé es un reordenamiento de fuerzas, más que la aparición de un nuevo actor potente que rompa ese esquema.
En provincias como Mendoza se han visto escisiones en los partidos locales, con fuerza política propia, que restan votos tanto al peronismo como al antiperonismo. Pero, para Costa, esos fenómenos no alcanzan para articular una tercera opción nacional significativa, según el diario Perfil.
La importancia de Buenos Aires y el humor ciudadano
Costa destacó que la provincia de Buenos Aires sigue siendo clave electoralmente. Allí, Milei nunca ganó, lo que lo convierte en un punto donde cualquier aspirante alternativo debe medirse con rigor.
Otro factor que juega es el humor social: mientras hubiese expectativas de mejora económica, la ciudadanía estaba dispuesta a apostar por nuevos actores. Pero esas expectativas se han reducido, y el voto opositor se ha tornado mayoritariamente antiperonista, lo que dificulta la aparición de una alternativa independiente al binomio principal.
Para que una tercera vía política en Argentina se consolide de cara a las próximas elecciones se requiere, según Luis Costa: un descontento ciudadano que no solo rechace a los partidos dominantes, sino también al propio sector al que pertenece el votante; actores provinciales fuertes que trasciendan lo local; y una capacidad de generar propuestas creíbles que atraigan así no sólo voto bronca, sino también confianza. Mientras tanto, el tablero parece inclinarse nuevamente hacia la clásica polarización entre peronismo y antiperonismo.