Un nuevo mecanismo nacional para alertas tempranas comienza su despliegue.
El Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) inició formalmente la implementación de AlertAR, el Sistema de Alerta Temprana que busca transformar la manera en que se comunican emergencias en todo el país. La medida fue oficializada en el Boletín Oficial y forma parte del Programa de Conectividad de Interés Público. La información se extrajo según informó ADNSUR.
Inversión estratégica y tecnología para emergencias
AlertAR contempla una inversión de $12.000 millones, provenientes del Fondo del Servicio Universal (FSU). Los fondos estarán destinados al equipamiento indispensable para garantizar el envío de alertas en tiempo real: servidores, torres, antenas, sistemas eléctricos, equipos de red y software especializado.
La Resolución 960/2025 establece que el sistema funcionará mediante Cell Broadcast, una tecnología que permite enviar notificaciones simultáneas a todos los teléfonos en zonas afectadas. Las alertas llegan incluso sin datos móviles activos y sin necesidad de que el usuario tenga una app instalada, lo que asegura cobertura inmediata y homogénea.
A su vez, la Resolución 1387/2025 incorpora criterios de acceso universal, garantizando que el servicio cuente con alcance nacional y niveles estables de calidad, independientemente del operador móvil.
Coordinación institucional y acuerdos clave
El proyecto surgió tras un pedido del Ministerio de Seguridad, que identificó la necesidad de contar con una herramienta rápida para la difusión masiva de alertas. El ENACOM creó entonces el Proyecto Específico AlertAR, actualmente en ejecución.
Para su funcionamiento se prevé la firma de tres convenios esenciales:
- Un acuerdo entre el ENACOM y organismos públicos vinculados a la gestión de emergencias.
- Un acuerdo con las operadoras de telefonía móvil del país.
- Un convenio con el Ministerio de Seguridad, que será el organismo rector del sistema.
Este esquema busca asegurar coordinación técnica, cooperación intersectorial y una base normativa sólida que evite improvisaciones en el futuro. Además, las resoluciones establecen procedimientos obligatorios, mecanismos de control y pautas claras para el mantenimiento y actualización permanente del sistema.
Fase de ejecución y pruebas piloto
El despliegue tecnológico se divide en equipamiento activo —servidores, routers, sistemas de conmutación y software— y equipamiento pasivo —antenas, torres y cableado—, con el fin de garantizar la cobertura de emergencia en todo el territorio nacional.
El programa avanzará a través de una licitación pública que asignará a los proveedores responsables de instalar la infraestructura necesaria. Tras la adjudicación, comenzará la fase de instalación en los puntos definidos por el ENACOM.
Una vez instalado el sistema, se abrirá una prueba piloto de 60 días, durante los cuales se emitirán alertas de prueba, se monitoreará su funcionamiento real y se ajustarán los protocolos junto a los organismos participantes. Este proceso permitirá dejar la plataforma lista para operar ante emergencias reales.




