Estados Unidos ha iniciado la reducción de su presencia militar en el flanco oriental de Europa, específicamente en la base aérea Mihail Kogălniceanu de Rumanía, en un movimiento que expertos en seguridad consideran potencialmente peligroso.
Mientras Washington asegura que no disminuirá sus efectivos en las otras dos bases rumanas, analistas advierten que Moscú podría interpretar este repliegue como «una invitación» para operaciones militares.
Detalles del repliegue militar
El ministro de Defensa rumano, Ionut Mosteanu, confirmó esta semana que las tropas estadounidenses pertenecientes a la 2ª Brigada de Infantería de la 101.ª División Aerotransportada abandonarán la base rumana rumbo a Kentucky «sin reemplazo». Según informó el medio Internacional, el gobierno rumano explicó que la decisión responde a que «la OTAN ha incrementado su presencia y actividades en el flanco oriental», considerando que ya no es necesaria la misma presencia estadounidense.
Postura oficial versus análisis expertos
Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos insisten en que esta medida no implica una «retirada» o «menor compromiso» hacia la OTAN y su Artículo 5 de defensa mutua, sino que representa «una señal positiva» sobre la creciente «capacidad y responsabilidad» de los aliados europeos. Sin embargo, esta visión contrasta con las advertencias de expertos en seguridad regional.
Advertencias de analistas militares
El coronel retirado del ejército estadounidense y exfuncionario de la OTAN Richard Williams declaró al medio ucraniano Kyiv Post que «no existe ninguna razón obvia ni táctica para la retirada de la brigada de la OTAN de Rumania». Por su parte, Justyna Gotkowska, del Centro Polaco de Estudios Orientales, alertó que «una reducción de tropas en la región podría ser interpretada por Rusia como una invitación» para iniciar operaciones militares en la zona.
Contexto estratégico y valor disuasorio
Los expertos destacan que, aunque los aliados hayan aumentado su presencia en la zona, las tropas estadounidenses tienen un enorme valor disuasorio en el flanco oriental europeo. La retirada se produce en un momento particularmente sensible, cuando la guerra en Ucrania continúa y las tensiones entre la OTAN y Rusia permanecen en niveles elevados desde la invasión de 2022.
Perspectiva de la OTAN y balance final
Desde la OTAN minimizan la importancia del movimiento, señalando que «no es inusual» que el Pentágono decida hacer reajustes en su presencia militar en Europa. Además, destacan que, a pesar de estos últimos movimientos, el despliegue estadounidense en el continente sigue siendo mayor que el existente antes de la invasión rusa de Ucrania en 2022, manteniendo una capacidad de respuesta significativa. Información extraída del medio 20minutos.




