Un equipo de medición industrial habría detectado ráfagas excepcionales en la cuenca del golfo San Jorge este lunes 17 de noviembre.
Comodoro Rivadavia atraviesa este lunes una de las jornadas de viento más intensas de los últimos años, en medio de la alerta roja emitida por el Servicio Meteorológico Nacional. Desde la madrugada, el temporal castiga no solo a la ciudad y las zonas rurales, sino también a los principales yacimientos de la cuenca, donde se registraron valores extremos que superan ampliamente los niveles habituales para la región.
Según datos internos provenientes de estaciones de medición utilizadas en áreas petroleras, en Cerro Dragón el viento constante llegó a marcar 312 km/h, mientras que la ráfaga máxima alcanzó un asombroso registro de 352 km/h, un valor inédito que refleja la magnitud del fenómeno. Aunque se trata de instrumentos operativos utilizados para monitoreo industrial, los datos dan cuenta de la violencia con la que el viento avanza sobre una vasta porción del sur chubutense.
Comodoro Rivadavia atraviesa este lunes una de las jornadas de viento más intensas de los últimos años, en medio de la alerta roja emitida por el Servicio Meteorológico Nacional. Desde la madrugada, el temporal castiga no solo a la ciudad y las zonas rurales, sino también a los principales yacimientos de la cuenca, donde se registraron valores extremos que superan ampliamente los niveles habituales para la región.
Según datos internos provenientes de estaciones de medición utilizadas en áreas petroleras, en Cerro Dragón el viento constante llegó a marcar 312 km/h, mientras que la ráfaga máxima alcanzó un asombroso registro de 352 km/h, un valor inédito que refleja la magnitud del fenómeno. Aunque se trata de instrumentos operativos utilizados para monitoreo industrial, los datos dan cuenta de la violencia con la que el viento avanza sobre una vasta porción del sur chubutense.
La situación genera preocupación en las operadoras petroleras, que mantienen protocolos especiales de resguardo, reducción de personal en áreas expuestas y limitación de tareas que impliquen riesgo por caída de estructuras, desplazamiento de materiales o afectación a equipos sensibles. En varios yacimientos se decidió suspender actividades en superficie y mantener guardias mínimas hasta que las condiciones mejoren.
COMODORO QUEDÓ PARALIZADO POR EL TEMPORAL DE VIENTO
En la ciudad de Comodoro Rivadavia, el panorama tampoco es alentador. Desde las primeras horas del día, se multiplicaron los reportes de voladuras de techos, cortes de energía, árboles caídos, roturas de cartelería y daños en vehículos estacionados. Las ráfagas más fuertes se sienten especialmente en barrios elevados y zonas abiertas, donde la visibilidad se ve reducida por nubes de polvo en suspensión.
Las autoridades municipales, provinciales y organismos de emergencia insisten en evitar cualquier tipo de circulación, salvo casos estrictamente necesarios. Las rutas de acceso se mantienen bajo estricta vigilancia y los equipos de Defensa Civil, Servicios Públicos, Bomberos y Seguridad continúan trabajando en distintos puntos de la ciudad, aunque la intensidad del viento dificulta las intervenciones.
La alerta roja sigue vigente y se espera que las ráfagas continúen con similar intensidad durante buena parte de la jornada. Aunque se prevé una leve mejora hacia la noche, las condiciones seguirán siendo adversas, con vientos que permanecerán en valores muy elevados.
En este contexto, las autoridades piden a la población tomar todas las medidas de precaución posibles, asegurar objetos sueltos, evitar exponerse en áreas abiertas y permanecer en sus hogares hasta que la situación empiece a normalizarse. Mientras tanto, la región continúa bajo la influencia de un temporal histórico, cuyos registros quedarán entre los más impactantes de los últimos años.




